Raúl Cortese
ENCARNACIÓN
Una enorme fiesta fue la vivida este sábado último con un marco impresionante de público y un comportamiento del tiempo acorde con las expectativas en la ronda de los Corsos de Encarnación.
Una verdadera fiesta en donde los distintos protagonistas de las comparsas participantes demostraron toda su habilidad, encanto y belleza, en lo que parecía ser una deuda pendiente, debido a las dos suspensiones que se habían producido a raíz de las malas condiciones del tiempo.
Mucho público en las graderías el Sambódromo, con un comportamiento ejemplar, danzando y bailando al paso de las comparsas y carrozas que desfilaron ante una bulliciosa concurrencia.
“Estamos muy contentos porque por fin hemos podido tener una noche sin problemas del tiempo, teníamos una deuda pendiente con el público y las comparsas hace rato que pedían pasar bailando. Nuevamente hemos demostrado el enorme valor que tiene este Carnaval y el nivel en el cual se mantiene”, declaró el presidente de la Comisión de Carnaval, José Nicolás Remezowski. El paso de todos los números finalizó a las 3.30 del domingo, dejando una sensación de haber cumplido con las exigencias del público y sus expectativas. Hubo gran número de extranjeros, sobre todo de la Argentina, que en grupos llegaban hasta la ciudad de Encarnación, para apreciar un espectáculo muy bien presentado, con carrozas de fina terminación e ingenio, y con murgas que se destacaron. Los clubes encaran esta semana con el objetivo de reacondicionar y poner todo a punto para sumar el próximo sábado la mayor cantidad de puntos ante el jurado.
