Durante la temporada otoño-invierno, las afecciones respiratorias son las principales causas de enfermedades y los más afectados son los niños y adultos mayores.
La consulta precoz ante la aparición de síntomas es fundamental para evitar complicaciones o la gripe mal curada.
Además, las bajas temperaturas ayudan a la rápida y mejor transmisión de agentes causantes de las infecciones respiratorias agudas.
Los casos más graves que incluso pueden causar la muerte se dan por lo general en pacientes con afección cardiaca, donde los síntomas de la gripe aparecen de forma mucho más rigurosa causando insuficiencia cardiaca.
Prevención
Practicar hábitos higiénicos
Realizar consultas oportunas al médico
Intensificar el consumo de frutas y verduras para fortalecer el sistema inmunitario
Aplicarse la vacuna antiinfluenza o antigripal
Síntomas
Fiebre, tos, dolor de garganta o cefalea.
Recomendaciones
-Reposar, previa consulta médica
-Cubrirse la boca y la nariz al toser y/o estornudar, con la flexura del brazo, nunca con la mano
Lavarse frecuentemente las manos, principalmente después de entrar en contacto con secreciones (limpieza de nariz, estornudos o tos).
-No compartir mate, tereré, cubiertos ni vasos con otras personas.
-En lo posible no acudir a lugares de mucha concentración de personas para evitar dispersar el virus.
Gripe o influenza
Es una de las enfermedades respiratorias virales más contagiosas y severas. Puede derivar fácilmente en infecciones respiratorias agudas, como bronquitis y neumonía.
Los síntomas iniciales son parecidos al de un resfriado, pero mucho más agresivos. Se caracterizan por fiebre muy alta, compromiso respiratorio, congestión nasal, de oídos, decaimiento mayor, sensación de ahogo y malestar severo. Los más pequeños suelen presentar náuseas y vómitos que podrían deshidratarlos.