Según el informe de la Comisaría 10ª de Tacuatí, el robo agravado se registró el sábado pasado, a las 10:00 aproximadamente, en el interior de un establecimiento ganadero, específicamente en el retiro Barrero Ruguá, propiedad de Peter Harder Wiebe, de 29 años, domiciliado en la colonia Santa Clara.
Resultaron víctimas el capataz de la estancia, su concubina y otros dos trabajadores de la propiedad.
Los autores del hecho fueron un grupo armado de aproximadamente 10 personas, quienes estaban encapuchados, con ropas camufladas y con armas largas, informó Carlos Aquino, periodista de Última Hora.
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Según los datos, los delincuentes interceptaron al capataz y a los demás trabajadores en el predio, manifestándoles que se trataba de un asalto, haciéndoles descender de sus caballos. Luego los llevaron hasta la casa en donde intimaron a su concubina, a su cuñada y a sus cincos hijos menores de edad. Los criminales se apoderaron de sus celulares y documentos.
Además, cortaron las cubiertas de tres motocicletas que se encontraban en el lugar y luego les obligaron a faenar dos vacas, una de ellas preñada, ambas de la raza Nelore.
Los hombres fueron obligados a transportar en dos oportunidades la carne sobre sus respectivos caballos hasta la orilla del río Ypané, donde se encontraban dos canoas de madera, que utilizaron para cruzar el río hacia el asentamiento Nueva Fortuna de la colonia Kurusu de Hierro, en el distrito de Azotey.
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Los desconocidos manifestaron a las víctimas que regresarían dentro de ochos días para faenar un toro. La Policía Nacional investiga el hecho y aún se desconoce a los autores.
El hecho se registró a 80 km aproximadamente de la estancia Guyra Campana, de la ciudad de Santa Rosa del Aguaray, de donde este lunes en horas de la tarde fueron llevados por un grupo criminal cuatro trabajadores, dos de ellos menonitas y dos paraguayos.
Tres de las víctimas fueron liberadas y una de ellas, identificada como Pedro Reimer, un joven de 23 años, que se desempeñaba como electricista, aún sigue en poder del grupo criminal autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), según confirmó a Monumental 1080 AM el comisario Nimio Cardozo, jefe del Departamento de Antisecuestro de la Policía Nacional.
Los delincuentes exigen a la familia del joven la entrega de provistas a 20 comunidades de Amambay y Concepción por el valor de USD 500.000, con un reparto de USD 25.000 para cada una, en un plazo de ocho días. Entre otras cosas, también piden que cada bolsa de víveres lleve logos del grupo criminal.