Se trata de Francisco Javier Caballero (40), quien se desempeñaba como guardia de seguridad de dicho establecimiento.
Agentes de la Comisaría 40ª fueron alertados del hallazgo del cuerpo y al llegar al lugar constataron el hecho.
De acuerdo a los primeros datos, se presume que la causa de muerte es un “traumatismo craneoencefálico”.
Según los intervinientes, el guardia presentaba fracturas en la mandíbula y el pómulo, lo que indica que habría sido atacado con extrema violencia.
La Policía Nacional inició la investigación con el fin de esclarecer los hechos y determinar las circunstancias del trágico suceso. De momento, no se tienen detenidos ni sospechosos del caso, pero el levantamiento de muestras podrían aportar datos a la investigación.
Los habitantes del barrio San Isidro están consternados por el crimen que genera preocupación en la zona y exigen que las autoridades esclarezcan el hecho, llegando a los autores de este violento crimen. AR