Néstor Pereira, un funcionario que se desempeña desde hace años como guardiacárcel en Tacumbú, reveló las amenazas y los momentos que tuvieron que pasar, junto a sus colegas, tras la revuelta que se desató este martes en la penitenciaría.
El funcionario comentó que en horas de la tarde inició el conflicto en el Pabellón donde se encontraba haciendo guardia con 8 personas más, cuando en un momento dado se acumularon más de 1.200 reos armados y los llevaron hasta una celda.
“Estaban todos armados con cuchillos y nos llevaron a una celda. No nos jugaron ni nada, solamente nos apretaron con sus armas, pero también nos amenazaron que si entraba gente de la Policía íbamos a morir todos”, contó el guardiacárcel en contacto con NPY.
El funcionario también dijo que los reclusos le pasaron agua y que estos le manifestaron que solo querían arreglar la situación con los directores o los jefes, no así “con gente de afuera”.
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“Nos encerraron en la celda con más de 50 personas custodiando. Nosotros no vimos cuándo ocurrieron los asesinatos”, aclaró.
El amotinamiento dejó como saldo a seis personas fallecidas, cuyos cuerpos fueron sometidos al Protocolo de Minnesota para identificar las causas de muerte, según el Ministerio Público.
En otro punto, Pereira señaló que los reclusos no le arrebataron de sus pertenencias, tampoco a sus compañeros, ya que antes fueron avisados que el problema no era con ellos, sino con las autoridades del Ministerio de Justicia.
“Nosotros como funcionarios antiguos veníamos manejando bien el control de Tacumbú, pero no sabemos de dónde vino esto. No sabemos quién organizó el amotinamiento. Fue todo de repente”, agregó.
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Por otra parte, el guardiacárcel aprovechó para pedir ante medios de prensa la necesidad de realizar cambios urgentes dentro de la institución.
“Necesitamos que venga gente que sepa ordenar, que sepa hablar con los internos y los funcionarios y que entienda el trabajo que tenemos. Nosotros sobrevivimos con un salario bajo, arriesgamos nuestra vida y no tenemos ni quién nos defienda”, reclamó el hombre.
El funcionario también mencionó que cuentan con un buen trato con las personas privadas de libertad, ya que se cuidan entre sí y a los familiares que llegan de visita hasta la cárcel.
El amotinamiento en el interior de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú se registró en la tarde de este martes. Las personas privadas de libertad habían tomado de rehenes a 19 guardiacárceles y exigieron la presencia de la ministra de Justicia, Cecilia Pérez, para negociar la libertad de los funcionarios. Ninguno resultó herido.