De acuerdo con el viceministro de Economía, Humberto Colmán, si bien la idea es reformular el sistema de jubilaciones estableciendo un esquema de aportes y beneficios unificados, se estudia fijar un mecanismo opcional para aquellos que quieran retirarse excepcionalmente.
“Creemos que no debe haber regímenes especiales, sino un régimen general con aportes iguales y mismos beneficios, pero si hay sectores que se quieren jubilar antes y con tasas mayores, el sistema también tiene que darle una respuesta”, expresó.
El proyecto, que se pretende presentar al Congreso antes de fin de año, está siendo elaborado en Hacienda, pero la cartera no descarta crear una mesa de discusión como la de la reforma tributaria.
La directora de Estudios Económicos del Fisco, Carmen Marín, indicó que otro de los puntos que se evalúan actualmente es el alcance de las modificaciones. En ese sentido, resaltó que la discusión pasa por si la nueva disposición ya puede aplicarse a los grupos activos o recién para los que se incorporen al sistema después de la nueva legislación.
Remarcó que la idea es equiparar la cancha para evitar el colapso de la Caja Fiscal, como ocurrió a inicios de los años 2000, cuando se tuvieron atrasos en los pagos de jubilaciones e incluso se apeligró la vida del régimen previsional.
El proyecto de reforma será acelerado por el Gobierno tras el rechazo del Congreso al veto presidencial realizado a la ley de jubilación médica. Esta legislación establece que el personal de blanco del Ministerio de Salud podrá jubilarse de forma ordinaria con el 90% de su salario promedio de los últimos tres años, con un aporte mínimo de 25 años y 55 años de edad. Para que sea del 100%, el aporte debe realizarse por 30 años y se debe contar con 60 años de edad.
Esta normativa establece además que solamente con 12,5 años de aporte y sin una edad mínima se podrá acceder a una media jubilación.
Según un estudio de Hacienda, estas modificaciones harán que en 2020 ya se empiecen a usar las reservas de la Caja Fiscal (USD 900 millones, incluidas las inversiones) para cubrir el déficit del sector civil, reservas que al ritmo actual de pagos se agotarán en 2027. El saldo rojo se financiará mediante el cobro de impuestos.
Inversiones se harán antes de julio, anuncian
El viceministro de Administración Financiera, Óscar Llamosas, anunció que se pretenden realizar las primeras inversiones con los excedentes de la Caja Fiscal dentro del primer semestre del año. Señaló que están trabajando en dos etapas. La primera es ver las mejores alternativas para diversificar las inversiones presupuestadas para este año, mientras que la segunda es analizar el uso de las reservas que están depositadas en el BCP. La Caja Fiscal tiene autorizado un presupuesto de G. 600.000 millones para invertir en instrumentos financieros en este 2019.
