Tras el correspondiente análisis realizado por los técnicos de Hacienda, la cartera recomendó a Mario Abdo Benítez, presidente de la República, la promulgación de la Ley de Presupuesto General de la Nación (PGN) para el ejercicio fiscal 2023, tal como fue sancionado en el Congreso, según anunció en la víspera el ministro Óscar Llamosas durante una conferencia de prensa en Palacio de Gobierno.
De esta manera, se dejó de lado la otra opción que estaba en estudio, que era el veto parcial. Llamosas señaló que a partir de ahora trabajarán en la reglamentación del PGN de este año, a través de la cual se buscará mitigar el impacto de los aumentos que se introdujeron en el Parlamento.
“El veto parcial no iba a eliminar los aumentos que se dieron y la otra opción, la del veto total de algunos artículos, iba a afectar también a aquellos propuestos por el Ejecutivo (...). Es decir, no podíamos vetar parcialmente solamente aquellos artículos agregados por el Congreso sin afectar las propuestas del Ejecutivo”, indicó.
En ese sentido, enfatizó que el decreto reglamentario será el instrumento que permitirá la mitigación del impacto de las modificaciones hechas por los legisladores al PGN 2023, al tiempo de recordar que el Poder Ejecutivo puede implementar de manera gradual los aumentos. “Vamos a trabajar en la gradualidad de la entrada en vigencia, tanto de los cargos que fueron creados como en la implementación de los aumentos salariales”, agregó.
bajo la lupa. El PGN cuenta con tres aspectos que son vistos con preocupación desde la cartera, que son la sobreestimación de ingresos tributarios, el mayor gasto salarial y el redireccionamiento de fondos de inversión a gastos corrientes. La normativa sancionada dejó el plan de gastos en un monto global de G. 105,36 billones (USD 14.844 millones), pero incluyó una sobreestimación de ingresos tributarios por valor de G. 184.210 millones y un adicional de G. 351.000 millones para financiar reajustes, más bonificaciones y creaciones de cargos, entre otros puntos.