22 dic. 2024

Hallan microplásticos en la dieta de los pingüinos de la Antártida

Un equipo científico ha constatado “la amplia presencia” de microplásticos en la dieta de los pingüinos de la Antártida, después de analizar las heces de tres especies de estos animales en diferentes lugares y años.

Pinguinos.jpg

Los científicos analizaron las heces de tres especies de pingüinos.

Entre otras partículas de origen antrópico, los investigadores han identificado poliéster y polietileno.

El trabajo se publica en la revista Science of the Total Environment y está firmado, entre otros, por investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España (MNCN-CSIC).

El estudio incide sobre la necesidad de conocer los efectos de estas partículas y de establecer medidas más efectivas para controlar la contaminación por plásticos y otras partículas de origen humano en el continente antártico.

Los microplásticos son partículas de menos de 5 milímetros que están cada vez más extendidas en los ecosistemas marinos, algo preocupante dada su persistencia en el ambiente y su acumulación en las cadenas tróficas, señala un comunicado del CSIC.

“Estos contaminantes llegan a mares y océanos principalmente a través de la basura y los desechos procedentes de las actividades antrópicas”, explica Andrés Barbosa, científico del MNCN y autor del trabajo.

Dada la baja presencia humana en el océano antártico y en la Antártida, cabría esperar una baja contaminación por microplásticos.

Sin embargo, las estaciones de investigación, los barcos pesqueros y turísticos y las corrientes marinas hacen que estas partículas lleguen a estos hábitats, pudiendo provocar una alta concentración a nivel local, relata José Xavier, investigador de la Universidad de Coímbra (Portugal) y otro de los autores.

El objetivo del estudio, en el que también han participado investigadores de Reino Unido, fue analizar la presencia de microplásticos en la península antártica y en el mar de Scotia, dada la importancia ecológica de estos hábitats.

Para ello, se analizaron las heces de tres especies de pingüinos: el pingüino de Adelia (Pygoscelis adeliae), el barbijo (Pygoscelis antarcticus) y el papúa (Pygoscelis papua).

“Los pingüinos se utilizan para muchos estudios porque su biología y ecología son bien conocidas y el hecho de que sean depredadores les convierten en buenos indicadores de la salud de los ecosistemas en los que viven”, subraya Barbosa.

Los resultados muestran que la dieta de las tres especies está compuesta por distintas proporciones de krill antártico, en un 85% en el caso del pingüino de Adelia; un 66% en el del barbijo y, finalmente, un 54% en el papúa.

“Se encontraron microplásticos en un 15, 28 y 29% de las muestras, respectivamente, en las tres especies estudiadas”, detalla Joana Fragão, de la Universidad de Coímbra.

La frecuencia de aparición de estas sustancias fue similar en todas las colonias, lo que induce a pensar que no hay un punto de origen concreto de contaminación dentro del mar de Scotia.

“Es necesario seguir estudiando en esta línea para comprender mejor la dinámica de estas sustancias y sus efectos en estos ecosistemas para guiar nuevas políticas de gestión en el continente antártico”, concluye Filipa Bessa, de la misma universidad.

Más contenido de esta sección
El oficial segundo Carlos Ruíz de la Unidad de Operaciones Tácticas Motorizadas- Grupo Lince, se dedica a rescatar, castrar, curar y dar un hogar feliz a los perros que rescata de las calles. Actualmente tiene 37 peludos bajo su protección e insta a las personas a realizar la adopción responsable.
La llegada masiva de mariposas blancas provocó encanto en los pobladores de Concepción, que quedaron maravillados con la belleza natural de los insectos.
Funcionarios del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible del Paraguay (Mades) rescataron este sábado a un guacamayo que era trasladado de forma irregular en un camión desde Altos a Luque. Un trabajador de plataforma fue el que alertó a las autoridades.
Un mono de considerable tamaño recorre viviendas del barrio Kennedy de Lambaré causando preocupación entre los vecinos, ya que no saben de dónde salió ni cómo llegó a esa zona.
El cocodrilo más grande del mundo, de 5,4 metros de largo y cerca de una tonelada de peso, falleció en el noreste de Australia, indicó este sábado el parque de animales donde vivía cautivo.
En la Clínica Veterinaria Municipal San Francisco de Asís, ubicada en Villa Elisa, Departamento Central, se ofrece una amplia variedad de servicios a costos accesibles, para que todas las mascotas reciban la atención que necesitan.