De una flota de seis móviles, el centro asistencial en cuestión solo dispone de dos en funcionamiento actualmente, uno se reactivó recién el pasado martes. Es decir, en todo este tiempo se manejó con un vehículo, por lo que para responder a la demanda de los pacientes en gran medida depende del Servicio de Emergencias Médicas Extra Hospitalaria (SEME) que dispone de seis unidades en Alto Paraná.
Carlos Vera, responsable de la Unidad de Ambulancias, suscribió que el Regional de CDE debe responder a las necesidades sanitarias de todo Alto Paraná y de departamentos vecinos. “Antes que el SEME se inaugure, el 5 de julio, estábamos absorbiendo toda esa demanda; por lo que de común acuerdo con la Dirección y la Décima Región Sanitaria, decidimos parar estos móviles y ponerlos de nuevo en condiciones”, comentó.
Refirió que estaban apoyando todos los traslados de pacientes de las ciudades de Presidente Franco, Hernandarias, Santa Rita, entre otros distritos con los equipos de la capital altoparanaense.
“Hoy, después que el Ministerio de Salud hizo el esfuerzo y se creó el SEME, nosotros tomamos la decisión con la aprobación de la Dirección de atajar un poco nuestros móviles y prepararnos para el verano, porque la demanda va a crecer”, indicó.
El costo de los servicios –dijo– está a cargo de la cartera sanitaria de Estado. Aclaró eso último ante versiones que señalaban que la pollada organizada por los funcionarios de salud, prevista para mañana, era para costear las reparaciones de los vehículos. “Lo que queremos es darles a estas unidades un poco más de comodidad, por lo que hacemos actividades para, por ejemplo, reponer los equipos de radio que ya no funcionan, así como aire acondicionado y para eso estamos ayudando con esta pequeña actividad que estamos haciendo, no es que el Ministerio no está cubriendo las reparaciones. Es decir lo que buscamos es dar un poco más de comodidad para los compañeros y los usuarios”, manifestó.
Desgaste. El Dr. Federico Schrodel, director del hospital, admitió que admiran la autogestión promovida por los jefes de servicios para reunir fondos y así poder “responder ante cualquier cuestiones extras que puedan surgir durante los viajes, que se sabe que puede ocurrir”, explicó.
Schrodel recalcó que las ambulancias que salieron de servicio fue por el excesivo desgaste producto del uso que se le dio antes del funcionamiento del SEME.
Recordó que el Hospital Regional es un centro de referencia de tres departamentos vecinos; por lo que el funcionamiento del SEME está ayudando mucho para responder a la necesidad existente. “Ahora el tiempo de espera para los traslados durante mucho menos y creo que es lo que se merece nuestro departamento. Son 6 ambulancias más que se sumaron a las seis que tiene nuestro hospital”, remató.