Un hombre fue gravemente herido en el calabozo de la Comisaría 2ª Metropolitana por otro preso. El arma, según el informe policial, fue dejada oculta entre las rejas por un grupo de hinchas del Olimpia detenidos días atrás, tras un partido de fútbol.
Esto se suma a la suspensión del partido entre Cerro Porteño y 2 de Mayo, el pasado lunes, tras la pelea de los hinchas. Incluso, un hombre fue detenido antes de entrar al estadio, porque tenía prohibición judicial de ingreso.
En el primer caso, fue imputado por lesión grave Ignacio Ramón López, por la fiscala Claudia Aguilera. Supuestamente, hirió con un cuchillo a Diego Pérez Agüero, quien tuvo una herida debajo de la axila, cerca del corazón, por lo que fue derivado al Hospital Barrio Obrero.
Según el informe policial, López había sido detenido para averiguaciones para corroborar su identidad. Fue llevado a una celda de la Comisaría 2ª Metropolitana, donde ya estaba preso Pérez Agüero. Discutieron y ahí habría acuchillado al otro.
La víctima fue auxiliada por los agentes, que lo llevaron hasta el citado centro médico. Según los policías, presumiblemente, el “cuchillo habría sido dejado entre las rejas de la ventana del calabozo por hinchas del club Olimpia demorados días atrás, y que el agresor encontró y luego utilizó”. Sin embargo, esto es investigado, ya que un testigo, otro preso que estaba ahí, dijo que el arma era de la víctima y López lo tomó antes.
Ayer, el juez Miguel Palacios decretó la prisión preventiva de Ignacio López por el delito de lesión grave, ya que existe peligro de fuga y de obstrucción a las investigaciones.
NO PODÍA ENTRAR. Por otro lado, poco antes del partido entre Cerro Porteño y Sportivo 2 de Mayo, en el Defensores del Chaco, a la entrada del estadio fue detenido Édgar Andrés Paredes López, quien el 22 de diciembre de 2022 fue favorecido con las medidas alternativas tras ser imputado por supuesta perturbación de la paz pública.
Entre las condiciones de su libertad estaba la prohibición de asistir a cualquier evento organizado por la Asociación Paraguaya de Fútbol y la prohibición de concurrir a las reuniones de la hinchada de Cerro Porteño.
Ante el incumplimiento de las condiciones, fue remitido ante la jueza de Garantías de turno. Ahí, la misma revocó las medidas alternativas que tenía y decretó la prisión preventiva del encausado.
En el citado partido, las barras organizadas de Cerro Porteño, Comando y La Plaza, protagonizaron una pelea, por lo que el encuentro fue suspendido por el árbitro.
Fiscala solicita imágenes de APF
La fiscala Patricia Sánchez, quien investiga el enfrentamiento ocurrido el lunes en el estadio Defensores del Chaco entre barras bravas del Club Cerro Porteño, solicitó las imágenes del circuito cerrado de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF), ya que la Policía no tuvo detenidos.
Se había solicitado un informe de lo ocurrido a la Policía Nacional, pero no se le detuvo a nadie, pese a la batalla campal que se dio en las graderías entre integrantes de las facciones llamadas Comando y La Plaza.
“Al no haber aprehendido, se pierde la flagrancia y es más complicado todo”, lamentó la fiscala.
Aparte de pedir las grabaciones de las cámaras, también se solicitó un pedido de informe al club Cerro Porteño sobre las entradas, si son nominadas o no, cómo las organizan con las barras, y el listado de los nombres, en caso de que sean nominadas.
Sánchez indicó que se asignaron oficiales técnicos para que analicen las imágenes que provean y que, a partir de ahí, se irá avanzando.
Buscan identificar a violentos y exigen sanción ejemplar
El comisario Mario Lesme, jefe de Eventos Deportivos de la Policía Nacional, explicó que investigan el vergonzoso episodio de violencia protagonizado por dos facciones de la barra organizada del Club Cerro Porteño, ocurrido el pasado lunes, en el estadio Defensores del Chaco.
El uniformado señaló que utilizarán las cámaras de seguridad del estadio para identificar a los sujetos que protagonizaron los actos violentos y, además, solicitan que se apliquen sanciones penales ejemplares a los autores.
La batalla campal se habría dado entre las dos facciones de la hinchada organizada, Comando y La Plaza, que mantienen diferencia desde hace años. Sin embargo, datos que manejan los investigadores de la Policía refieren que dicha enemistad se habría agravado por una disputa del dominio del microtráfico interno.
Para Lesme, los clubes, en este caso particular el Club Cerro Porteño, no están exentos de responsabilidad en los sucesos, por lo que pidió a la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF), que aplique sanciones.
En ese sentido, propuso que las ventas de entradas se realicen hasta cuatro horas antes del evento, lo que les permite a los agentes policiales un mejor control en las inmediaciones de los estadios.
El comisario resaltó que la batalla campal se inició “por un problema entre dos facciones, ambas entran en el mismo sector. Antes del incidente se estaban empujando, pateando, y después se agravó”, explicó.
El comisario Lesme admitió que cuando se realizan los controles en las afueras del estadio, a la hora de la entrada de los aficionados, no se divide a los grupos antagónicos.
Videos publicados en las redes, que habrían sido filmados horas antes del partido de la noche del lunes, revelan cómo algunos hinchas se prepararon para ir a la cancha y algunos, incluso, llevaron armas.