Cinco desconocidos, con arma de fuego en mano, llegaron hasta una cancha de vóley, ubicada en el barrio San Rafael de la ciudad de Presidente Franco y realizaron disparos contra tres personas.
Los heridos fueron identificados como Carlos Algarín Solalinde, quien se desempeña como guardia de seguridad ciudadana, el suboficial de la Policía Nacional Hernán Gustavo Ramírez Cabañas y Diego Ramón Portillo Carballo.
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El guardia y el agente policial fueron trasladados hasta el centro de salud local para ser atendidos, mientras que Portillo fue llevado en el hospital privado Sagrada Familia, informó el periodista de Última Hora Edgar Medina.
Recibí las noticias en tu celular, unite al canal de ÚH en WhatsAppEran las 20.50, aproximadamente, del viernes, cuando los autores del hecho llegaron al lugar a pie y extrajeron sus armas de fuego; posteriormente, efectuaron varios disparos contra las víctimas, quienes estaban en el lugar jugando cartas.
Al finalizar el ataque, los hombres se dieron a la fuga, a bordo de una camioneta tipo Terrano. La fiscala Analía Rodríguez tiene a su cargo la investigación.
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Según los antecedentes, Diego Portillo había sido detenido en agosto del 2015 por, supuestamente, haber hecho circular billetes falsos en un casino de Ciudad del Este y hacer apuestas en máquinas tragamonedas.
La fiscala Liliana Denice Duarte había abierto una carpeta de investigación en su contra por circulación de moneda no auténtica y solicitó la aplicación de medidas alternativas a la prisión preventiva.
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Portillo es hijo de Carlos Pedro Juan, que era conocido por la Policía Nacional como un antiguo supuesto narcotraficante de la frontera. El hombre fue asesinado a balazos en diciembre del 2011, en el complejo deportivo Dieguito, ubicado en el mismo barrio donde ocurrió el atentado en la noche de este viernes.
Mientras que, en cuanto al agente de la Policía Ramírez, el supuesto líder del Comando Vermelho Marcelo Pinheiro, alias Marcelo Piloto había acusado, en noviembre del año pasado, de que en Ciudad del Este había sido secuestrado por el uniformado, y este le quitó –según su versión– USD 25.000 y dos vehículos.
