Los hipopótamos se han reproducido en exceso, cuesta mucho mantenerlos, no pueden ser controlados porque son agresivos, no tienen dónde encerrarlos, ni siquiera saben a ciencia los que se han escapado, según publica el sitio digital el mundo.es.
La hacienda está situada a orilla del río Nare, afluente del Magdalena, en Doradal, corregimiento de Puerto Triunfo, un tórrido municipio del departamento de Antioquia, a tres horas de Medellín.
La empresa privada que decidió alquilar al Estado la hacienda para convertirla en un parque temático, con distintas especies de animales como atractivo principal, ha pedido ayuda para trasladar a los animales pero hasta la fecha nadie les dio una solución.
En la actualidad hay cuatro o cinco que se han marchado por el río hacia destinos desconocidos, lo que pone en riesgo la vida de campesinos y pescadores.
Las autoridades se deslindan de responsabilidades y ninguna está dispuesta a ocuparse de los animales.
Luz Helena Sarmiento ministra del medio ambiente, señaló hace tiempo que su cartera pondría en marcha un plan para control, captura, ceba y confinamiento de la especie, pero nunca lo llevaron a cabo con la excusa de que debe ser la Corporación Autónoma Regional de las cuencas de los ríos Negro y Nare, que tiene la hacienda Nápoles bajo su ámbito de actuación, las que deben intervenir.
En el instituto Humblodt, por su parte, sugirieron sacrificar a unos ejemplares, pero nadie se atreve a hacerlo.
El Ejército comenzó su caza y al final lo abatió. Los soldados se tomaron una foto con el cadáver y todo el mundo les criticó por considerar que no debieron matarlo.
Se abrió un debate sobre qué hacer con ellos, si devolverlos a África para mandarlos a un zoológico, pero ninguna nación africana tenía interés en acogerlos, transportarlos suponía una inversión millonaria.
Hasta el momento la situación no ha cambiado y los hipopótamos cada vez se van reproduciendo más.