Jorge Rubiani hizo énfasis en la importancia de hablar con la verdad sobre la Guerra contra la Triple Alianza. Afirmó que, como en todo conflicto, hay culpas y legados de heroísmo por parte de quienes nos condujeron en la batalla.
“Si hay culpas de alguien por el desencadenamiento de un conflicto tan oneroso en vida, también hay legados de heroísmo, de responsabilidad, de patriotismo, que no honramos debidamente”, expresó Rubiani a Monumental 1080 AM.
Continuó señalando que en 150 años no se aprendió nada, especialmente en cuanto a las relaciones con Brasil y Argentina, donde hasta la fecha somos dóciles en muchos aspectos.
“En 150 años no aprendimos absolutamente nada, sobre todo no aprendimos a conocer a nuestros interlocutores, especialmente argentinos y brasileños. Que muchas veces muestran solidaridades ocasionales cuando hay gobiernos que aparentemente coinciden en conceptos ideológicos u operativos de gobierno, pero tampoco se sacan las culpas haciendo las cosas como tienen que hacer”, indicó.
Añadió que, actualmente, la diplomacia hace muy poco para lograr ciertas reivindicaciones y recuperar elementos que se encuentran bajo el gobierno brasileño, como archivos correspondientes a la guerra.
“Es el caso de Brasil, los diputados del PT votaron la suspensión de entregar los archivos paraguayos que están en Itamaraty, por 75 años más, o sea, serán secretos para siempre. Y ese tipo de cosas molestan. Y las medidas indulgentes, distendidas e irresponsables de nuestros diplomáticos al respecto”, sostuvo.
Sobre el eterno debate que gira en torno a si Francisco Solano López fue un tirano por someter al país durante tanto tiempo a la guerra, expresó que pudo tener sus defectos, pero estuvo en el lugar preciso y, gracias a eso, hoy seguimos teniendo el territorio que tenemos.
“El tema de los hombres del pasado, hombres a quienes honramos como héroes, fueron personas que estuvieron en el lugar preciso, con la actitud correcta, dejándonos el país que nosotros queríamos y creemos que es nuestro. Si no hubiese sido por la insistencia y resistencia de López, que prefería perecer antes que rendirse, no se hubiera hecho visible la resistencia del Paraguay en el mundo y eso obligó a los aliados a preservar al Paraguay. Independiente a que López haya sido el tirano, el déspota o el hombre cruel que unos pintan, gracias a López el Paraguay existe”, afirmó.
Agregó que lo mismo puede decirse de Gaspar Rodríguez de Francia. “Si no hubiera sido por Francia y el aislamiento que impuso en un momento determinado, hubiéramos sido todos argentinos, así de simple es la cosa”, expresó Rubiani.
El historiador volvió a recalcar la importancia de dejar las discusiones sobre quién fue bueno o malo en la historia. Es mejor atender la importancia de la historia para lograr cambios.
“La gente debe dejar sus broncas y atender realmente a los rigores de la historia porque la historia tiene que ser operativa, tiene que servir para algo. No tiene que servir solamente para que discutamos sobre ello, tiene que servir para que asumamos un carácter nacional que todavía estamos lejos de representar como lo hicieron los combatientes de la Guerra del Chaco que, a pesar de venir del fondo del país, vinieron con la convicción de que existía un país, una nación, un legado y una responsabilidad correspondiente”, sostuvo.
Jorge Rubiani expresó que también es importante asumir las culpas propias que genera un conflicto tan grande como una guerra. “Si pretendemos que los demás sinceren sus actos y nosotros no lo hacemos, entonces estamos reclamando que la historia siga la rueda de vendettas que algunos pretenden”, acotó.
Finalmente, habló de sincerar los datos y no jugar con falsedades en cuanto a datos que se fueron tejiendo a lo largo del tiempo.
“No repetir estereotipos como decir que a López le regalaron la espada de San Martín, lo cual no es cierto y con ese tipo de cosas no contribuimos en nada al sinceramiento que es necesario”, indicó.
El historiador refirió que esto se dio bastante porque hubo una competencia para saber quién se independizó primero y así con muchas cosas más, como el ejemplo del ferrocarril. “Nosotros no fuimos los primeros en América, fuimos los quintos en tener ferrocarril. Nosotros no nos independizamos de España, nos independizamos de Buenos Aires. Buenos Aires no se independizó en 1810, recién en 1816 se declaró república”, añadió.