Agentes policiales que se encontraban realizando una intervención en la localidad de Brítez Cué, Departamento de Canindeyú, fueron amenazados con arma de fuego por un hombre en aparente estado etílico y tuvieron que suspender el procedimiento.
El hecho ocurrió en la zona de influencia de Felipe Santiago Acosta, alias Macho.
El episodio tuvo lugar el lunes 25 de diciembre, pasadas las 08:00 horas, en pleno festejo de la Navidad en un local bailable. El dueño del sitio realizó una denuncia en la Subcomisaría 24 debido a los disturbios que estaba generando un hombre, por lo que llegaron agentes policiales a bordo de una patrullera.
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Los uniformados abordaron a César Gabriel Mareco Duarte (25), quien supuestamente estaba protagonizando los disturbios, y le solicitaron sus documentos, pero el hombre habría tenido una actitud desafiante amenazando con disparar a los intervinientes y a los presentes (hombres, mujeres y niños).
Los policías optaron por retirarse del lugar a fin de evitar daños mayores y pedir apoyo a otras comisarías, momento que también fue aprovechado por el denunciado para abordar una motocicleta y huir, informó Carlos Aquino, periodista de Última Hora.
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La fiscala Marta Cabrera, que está a cargo del caso, dispuso que todo lo actuado sea elevado a esa unidad del Ministerio Público.
De acuerdo con el informe de los intervinientes, el sospechoso no cuenta con antecedentes penales y no se tiene la confirmación de si forma o no parte de la gavilla de alias Macho, quien se encuentra prófugo y es uno de los delincuentes más buscados por la justicia.
Acosta Riveros fue condenado a 25 años de prisión por el asesinato de un japonés en el 2005 y fue a prisión, pero logró escapar y se instaló en Canindeyú, donde maneja toda la plantación de marihuana de la zona.
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En setiembre de este año, según investigaciones, encabezó a un grupo de 30 a 40 hombres armados que atacaron a policías del Departamento de Investigaciones en Brítez Cué.