Los ministros de Hacienda y Educación, Lea Giménez y Enrique Riera, respectivamente, trataron de destrabar la medida de protesta hasta la última hora de este miércoles. Se reunieron a las 19.00 con gremios docentes y presentaron una contrapropuesta esperando una respuesta favorable de los docentes, pero esto no ocurrió.
El Ejecutivo ofertó a último momento un incremento de USD 41 millones, distribuido de la siguiente manera: suba del 8% para los docentes que tienen más de 20 años de antigüedad, 5% para quienes tengan menos de 20 años dentro del Ministerio de Educación y de un 3% para los docentes que se capaciten en el Ministerio de Hacienda.
Esta propuesta no fue aceptada por los docentes ya que el sector pide un incremento salarial para todos los docentes con la intención de que todos los educadores, sin distinción, perciban al menos el mínimo profesional.
En medio de la protesta y los cierres de caminos de este miércoles, habló el representante de la Federación de Educadores del Paraguay (FEP), Silvio Piris. Dijo que el 90% de los docentes a nivel nacional se incorporará a la medida de protesta este viernes: último día de huelga.
“La mayoría se va a sumar mañana. Al menos 200 ómnibus van a venir desde el interior del país. Esperamos a 20.000 personas este viernes que se van a sumar a la huelga de docentes”, precisó Piris en contacto con la 970 AM.
A su criterio, el ministro de Educación, Enrique Riera, tiene las manos atadas en esta situación ya que la decisión real la puede ofrecer solo el Poder Ejecutivo, ordenándole el desembolso al Ministerio de Hacienda.
“Queremos que el salario básico profesional sea para todos. Planteamos inclusive que se haga el incremento en cuatro años y se aumente un 16% para todos. Ellos no aceptaron. Si ellos aceptaban no íbamos a llegar a la medida de fuerza. No tuvieron nunca una propuesta seria en todo este tiempo”, señaló.
La movilización de docentes se presentó intensa este jueves. Los maestros que marcharon desde la Plaza Uruguaya hasta el Ministerio de Educación y Ciencias quemaron frente al edificio estatal la propuesta del Gobierno. Expresaron de esta manera que no aprueban el nuevo intento de destrabar la huelga.