El 31 de octubre pasado, en juicio oral y público, los jueces Laura Ocampo, Fabián Weisensee y Cándida Fleitas habían condenado a cuatro años de cárcel a Ferreira y Godoy, y absolvieron al despachante de Aduana Néstor Ramírez.
Los fiscales Néstor Coronel y Luz Guerrero plantearon recurso de apelación especial contra el fallo. Solicitan la nulidad de lo resuelto y que se realice otro juicio oral para los tres acusados, según señalaron en su escrito.
Además, el abogado César Alfonso, por la defensa de la presidenta de Imedic SA, Patricia Ferreira, también presentó apelación especial, donde solicita que en forma directa se disponga la absolución de la procesada.
Finalmente, el abogado Marcio Battilana, por la defensa de Nidia Godoy, también planteó recurso de apelación especial, donde igulamente solicita que los camaristas, por decisión directa, absuelvan de culpa y reproche a su defendida.
El único que no planteó recurso es el abogado Claudio Lovera, defensor de Néstor Ramírez, quien había sido absuelto de culpa y reproche en el juicio oral y público, por los integrantes del Tribunal de Sentencia.
ARGUMENTOS. Los fiscales Coronel y Guerrero apelaron la absolución de los tres acusados por el delito de asociación criminal, la absolución de Néstor Ramírez, y las condenas de cuatro años de encierro para Patricia Ferreira y Nidia Godoy, con lo que piden que se realice un nuevo juicio.
Sostienen que hubo un razonamiento incompleto respecto a la absolución de los tres acusados por asociación criminal. Esto también se dio en la absolución del despachante de Aduanas por los delitos de producción de documentos no auténticos y comercialización de medicamentos no autorizados.
Remarcan que también fue insuficiente el fundamento sobre las bases de la medición de la pena, con lo que hubo una incorrecta aplicación de las condenas a Ferreira y Godoy.
Por su parte, respecto a las defensas, sostienen que hubo incongruencia entre la acusación, la resolución que elevó el caso a juicio oral y la sentencia. De este modo, alegan que variaron los hechos, con lo que quedaron en indefensión respecto a lo señalado por la Fiscalía.
Además, se utilizaron copias simples de documentos como pruebas en el juzgamiento público. Con ello, dicen que no hace falta otro juicio oral, sino que directamente el Tribunal de Apelación debe dictar la absolución de las dos acusadas.
Los recursos fueron planteados ante el Tribunal de Sentencia que deberá correr traslado a las demás partes de las presentaciones.
Una vez que sean contestadas, el caso será enviado al Tribunal de Apelación Penal, para que los estudie.
Con ello, habrá que esperar qué deciden los camaristas respecto a los recursos que promovieron las dos defensas y los dos fiscales contra la resolución que se dictó en el juicio oral.