El hecho se registró el 1 de enero, cerca del mediodía, en una vivienda ubicada en la ciudad de Areguá, Departamento Central.
En esa ocasión, la madre llevó a su hijo hasta el Hospital de Trauma y había dicho que el niño pisó un petardo lanzado por unos vecinos, que cayó en el patio de su casa.
Sin embargo, tras la intervención del Ministerio Público se apuntó como responsable al abuelo del niño. La pareja del adulto corroboró dicha información.
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La fiscala Sandra Ledesma formuló una imputación contra la madre del pequeño, por la presunta comisión del hecho punible de violación del deber de cuidado. También fue imputado el abuelo, por lesión grave.
Se solicitó la prisión preventiva para el hombre y medidas alternativas a la prisión para la mujer. El abuelo se expone a una expectativa de cinco años de pena privativa de libertad, mientras que en el caso de madre, la pena sería de 2 años.
Según manifestó la representante del Ministerio Público a NPY, el niño está a cargo de la Defensoría de la Niñez y el Juzgado de la Niñez, que ya tomaron intervención en el caso.
Los nombres de la víctima e imputados se omiten en cumplimiento del artículo 29 del Código de la Niñez, que prohíbe la publicación de datos que posibiliten identificar a los menores de edad en condición de víctima o supuesto autor de hechos punibles.