Con una capacidad instalada de 221 megavatio pico (MWp) y con un sistema de almacenamiento en baterías de 1.2 gigavatio-hora (GWh), Quillagua es capaz de entregar 200 MW durante 6,2 horas después de la puesta del sol.
Este hito marca la última etapa antes de iniciar su operación comercial en las próximas semanas y comenzar a atender su contrato de compraventa de energía limpia a largo plazo, asegurando el suministro de energía solar durante la noche y despachando cualquier excedente al mercado comercial.
Lea más: Viceministerio experimenta con plantas solares para incentivar su uso
“Es un orgullo iniciar con algunos meses de antelación la operación de la planta de Quillagua, que trae la energía del sol de noche, y compartir este momento con nuestros socios, con la comunidad y con las instituciones y autoridades locales”, señaló el CEO Global de Contour Global, Antonio Cammisecra.
En cuanto a la incorporación de baterías de larga duración, Cammisecra destacó que el proyecto “es clave para estabilizar la red, abordando el exceso de oferta diurna y los desafíos de la demanda máxima”.
“Estamos muy comprometidos con este país y más allá del almacenamiento, también estamos explorando oportunidades en energía eólica, diversificando nuestro enfoque tecnológico para satisfacer las necesidades energéticas dinámicas de Chile”, subrayó el ejecutivo.
Le puede interesar: Energías eólica y solar generan 12% de la electricidad mundial
Chile, un país de 19 millones de habitantes y una geografía muy extrema, con el desierto al norte y los grandes bosques al sur, es capaz de producir 70 veces más de electricidad de la que hoy necesita.
En los últimos seis años, la participación solar y eólica se multiplicó por diez en la matriz energética del país y se espera que las energías renovables lleguen al 70% de la misma antes de 2030, según datos oficiales.
Fuente: EFE.