Saqueos, exceso de alcohol y descontrol se registran entre los miles de aficionados que se congregaron frente al monumento para observar el partido de su selección en pantalla gigante, sobre la avenida 9 de Julio.
Los efectivos de las fuerzas de seguridad no tardaron en reaccionar lo que produjo corridas y disturbios. Carros hidrantes y gases lacrimógenos intentan dispersar a la multitud congregada en el lugar.
La policía demoró a varias personas tras el saqueo de un local comercial situado en las inmediaciones.
Algunos ciudadanos reaccionaron contra los delincuentes lo que produjo disturbios entre los mismos hinchas situados en el Obelisco, informó el portal Tn.com.ar.
Argentina cayó en la final de la Copa del Mundo ante el seleccionado alemán.