29 abr. 2025

Indagan a un ex piloto vinculado a Minotauro por el asesinato de Pecci

Un oficial de la Fuerza Aérea Colombiana se suma a los 18 detenidos sospechosos del atentado que acabó con la vida del agente contra el crimen organizado, en una playa de Cartagena.

El oficial de la Fuerza Aérea Colombiana, Andrés Felipe C. B, está en la mira de los investigadores que buscan esclarecer el asesinato del fiscal Marcelo Pecci, ocurrido el pasado 10 de mayo, en una playa de Cartagena, Colombia.

El ex militar se suma así a los 18 sospechosos que tienen hasta el momento los investigadores de Paraguay, Colombia y Estados Unidos, que trabajan en el caso.

Las autoridades colombianas vinculan al piloto con el clan Rocha de Brasil, que tiene vínculos con el Primer Comando Capital (PCC) del cual es parte Sergio de Arruda Quintiliano Netto, más conocido como Minotauro, capturado por Pecci el 4 de febrero de 2019 en una operación antidrogas.

Con esta detención, cada vez es más fuerte la versión de la autoría intelectual de Minotauro en el crimen del fiscal paraguayo.

El crimen se podría haber ordenado desde una cárcel brasileña, donde el hombre se encuentra detenido.

De acuerdo con el medio colombiano, los homicidas de Pecci lo siguieron en el hotel, en la isla Barú, Colombia, el día anterior, y a la mañana siguiente, para no levantar sospechas, rondaron por el balneario.

El pasado 10 de mayo alquilaron la moto acuática y fueron hasta la playa donde estaba el agente del Ministerio Público con su esposa. Esperaron a que Pecci saliera del mar y lo silenciaron con un disparo en la boca y dos en la espalda.

Entre los sospechosos también se encuentra Diego Mauricio Blanco, otro piloto colombiano señalado por las autoridades como empleado de narcos brasileños.

Blanco y Andrés Felipe ya habían sido detenidos en Brasil en una operación antimafia donde se incautaron de avionetas y submarinos para transportar drogas desde Colombia y Paraguay hacia Brasil, Venezuela y Surinam, y de allí al resto del mundo.

Se sospecha que ambos serían los encargados de mover las avionetas con droga y el dinero de su venta, además, de trazar rutas irregulares y mapas de vuelo para evadir las autoridades aeronáuticas de varios países.

Recuerdan en Italia labor del fiscal contra grupos mafiosos

“Nuestros pensamientos están hoy con Marcelo Pecci, el fiscal antimafia asesinado en su luna de miel, quien se formó con nosotros”, dijo Luigi Di Maio desde el palco del Foro Itálico de Palermo (Sicilia, sur) en la conmemoración de la masacre en la que murieron el magistrado Giovanni Falcone, su esposa y tres miembros de su escolta, 30 años atrás.

De esta manera, el ministro italiano de Relaciones Exteriores recordó al fiscal paraguayo, asesinado el pasado 10 de mayo, en una playa colombiana.

Di Maio reveló además que Pecci, fue entrenado por el gobierno italiano junto a otros con 400 magistrados de América Latina y el Caribe, en lucha contra las organizaciones del crimen organizado.

El 6 de diciembre de 2021, el fallecido fiscal había anunciado, a través de su cuenta de Twitter, del encuentro que tuvo con las autoridades del país europeo.

“Me reuní en Buenos Aires con el agregado policial de Italia. Ratificamos acciones conjuntas con la Fiscalía, como director exclusivo de investigaciones penales en Paraguay, ante la eventual presencia de la mafia italiana en general y la ndrangheta en particular”, escribió.

El evento, en el que recordaron a Pecci, se llamó “La vocación global del pensamiento de Giovanni Falcone: la proyección internacional de la lucha contra la mafia”.

Allí hablaron de las principales iniciativas italianas en materia de diplomacia jurídica y seguridad, entre las que figura el programa Falcone Borsellino.

Esta iniciativa aborda la cooperación y asistencia técnica en materia de justicia, y policía hacia los países de América Latina y el Caribe.

El 23 de mayo de 1992, 500 kilos de explosivos reventaron la autopista entre el aeropuerto y Palermo en Capaci, matándole a Giovanni Falcone, a su esposa, la jueza Francesca Morvillo, y a tres hombres de su escolta.

Menos de dos meses después, las organizaciones criminales también eliminaron, en otro terrible atentado, a su amigo Paolo Borsellino, el otro gran juez antimafia.