Tras el violento desalojo que sufrieron en su comunidad en el distrito de Itakyry, en Alto Paraná, indígenas Avá Guaraní se movilizaron ayer por el microcentro de Asunción para exigir respuestas de las autoridades. Los nativos cerraron la calle Paraguayo Independiente y 14 de Mayo.
La lideresa de la comunidad Ka’a Poty, Marta Díaz, alegó que no son invasores de las tierras en las que se instalaron desde el 2018 y exigió a las autoridades del Indi respuesta rápida, ya que quedaron sin sus propiedades.
Unos 60 adultos y 44 niños y niñas se instalaron de forma precaria en la Plaza de Armas frente al Congreso Nacional. Las carpas improvisadas no son suficientes para resguardarse del frío, por lo que Marta pidió a la ciudadanía que los ayuden con mantas, más carpas y alimentos.
Cuestionó la inacción de las autoridades por no evitar el desalojo e insistió en que les devuelvan las tierras donde se instalaron para vivir y dónde incluso construyeron escuelas reconocidas por el Ministerio de Educación y Ciencias.
Díaz explicó a NPY que se promovió una acción autónoma de nulidad. Actualmente existe un litigio por esas tierras, ya que hay 12 títulos superpuestos, entre ellos el del propio Indi, que inició un juicio de reivindicación, ya que poseen los títulos de propiedad.
El Indi había informado el año pasado a la Comisión de Pueblos Indígenas del Senado que se encontraban trabajando en la mensura judicial de las 1.300 hectáreas y que habían logrado una tregua con los colonos brasileños, pero una ex fiscala de marca fue la que impulsó el desalojo.