En Paraguay hay una profundización de la inequidad en ámbitos y sectores como en educación, tierra, salud, trabajo, indígenas y campesinos, además de la falta de oportunidad para los pobres.
Esto según las conclusiones que dieron a conocer ayer los obispos del Paraguay tras debatir sobre la realidad nacional durante la 231ª Asamblea General Ordinaria de la Conferencia Episcopal Paraguaya.
Sobre el tema de la tierra, el conclave de obispos exhorta a los sectores a promover un verdadero diálogo en torno a la problemática en el campo, con enfoque concreto y profundo. Piden los sacerdotes acompañar a la gente del campo, a reflexionar sobre la problemática de la tierra, crear conciencia y asistir a las víctimas de injusticias. ‘‘Urge impulsar un proyecto para promover la reforma agraria’’, sostienen los religiosos en el comunicado difundido durante una conferencia de prensa en la Casa Pastoral Monseñor Juan Sinforiano Bogarín.
Afirman que la reforma agraria requiere una mirada profunda de la problemática relacionada con la tenencia y propiedad de la tierra, que esto hay que juzgarla en equipo desde elementos históricos y elaborar propuestas desde la Doctrina Social de la Iglesia.
Asimismo, la CEP destaca que en el país se está viviendo un contexto muy difícil al no existir una propuesta clara ni apoyo adecuado para el desarrollo de la Agricultura Familiar campesina e indígena, que debe tender a una agricultura que provea alimento a la gente y que en lugar de esto se privilegia la agricultura a gran escala para la exportación.
Faltan políticas tendientes a una planificación territorial que posibilite el desarrollo y la convivencia armónica de los diversos modelos de producción y esto va unido a los impuestos injustos. ‘‘Constatamos falta de oportunidad para los pobres. En este sentido, muchas de las leyes aprobadas para instituciones del Estado van en desmedro de los más pobres. Nos preocupa la falta de diálogo y escucha’’, destaca la CEP.
Inseguridad. En cuánto a la situación de la seguridad, la Conferencia Episcopal urge a las nuestras autoridades nacionales a que tomen medidas para evitar el avance de la inseguridad en las diversas comunidades, principalmente el narcotráfico, que ‘‘ha permeado las instituciones públicas’’ y que actúa con violencia atentando contra la vida con absoluta normalidad.
Otros puntos que preocupa a los obispos es el aumento del sicariato, feminicidio, robos y asaltos con derivación fatal, entre otras manifestaciones de la inseguridad creciente. ‘‘El gobierno y las instituciones responsables deben redoblar esfuerzo para devolver la tranquilidad y paz a nuestro pueblo’’, exhortan.
Evangelizar. Desde la institución eclesial ven necesario evangelizar el ámbito de la política y de los políticos, desde la propuesta de la Doctrina Social de la Iglesia, para que las autoridades públicas amen la patria y no solo sus intereses. ‘‘Debemos priorizar la evangelización. Necesitamos dimensionar y atender lo humano en el proceso de la evangelización’’.
La CEP propone dedicar el 2022 al laicado para abordar temas de la realidad nacional y eclesial y encarar acciones que posibiliten la conversión personal y la transformación social.
Ministerio de la familia
En este contexto de inequidad social, la Conferencia Episcopal del Paraguay destaca que se debe apostar a la base estable de una sociedad que es la familia. En este sentido, los religiosos sugieren proponer al Estado que se promueva y acompañe a las familias para fortalecerlas con la creación de un Ministerio de la Familia. Este anuncio despertó polémica en diversos sectores por la intención de agrandar el Estado.