La Coordinadora por los Derechos Humanos en Paraguay (Codehupy) realizó ayer la presentación de su informe anual número 26, manifestando que este 2021 fue un año triste y de duelo por las muertes a causa de la pandemia de Covid-19, así como la ola de desalojos a comunidades indígenas y campesinas, entre otras situaciones de violaciones de derechos humanos registrados en el corriente curso.
“El 2021 fue particularmente luctuoso. El deliberado desmantelamiento del sistema público de salud llevó al país a un duelo social sin precedentes con miles de muertes evitables”, fue el mensaje de la Codehupy en un video proyectado que recordó a varios defensores de derechos humanos y líderes comunitarios que fallecieron a causa del Covid-19.
El secretario ejecutivo de la Codehupy, Óscar Ayala Amarilla, expresó que el informe recoge las principales preocupaciones de la sociedad civil. Dijo que preocupa de sobremanera que el Congreso se haya declarado este año defensor de la propiedad privada, dejando de lado la vida de las comunidades campesinas e indígenas que son desalojadas de manera deliberada.
Además, cuestionó que, especialmente en el marco económico, el modelo de desarrollo no pone a la vida humana como punto de partida, sino todo lo contrario, en alusión a los casos de intoxicación por agrotóxicos y el desplazamiento territorial de las comunidades indígenas y campesinas.
La presentación se llevó a cabo en la Plaza de la Democracia, donde se instaló una Carpa de los Derechos Humanos, donde se realizarán actividades a lo largo de toda la semana.
Temas. Carolina Robledo, de la coordinación de turno de la Codehupy, habló de la situación de los derechos humanos de la comunidad LGTBIQ en el Paraguay, donde subrayó cuatro puntos principales: la negación de la discriminación, la disociación de la orientación sexual, el no reconocimiento de las parejas, y el no reconocimiento de la identidad de género.
La investigadora Marcela Zub habló sobre la violencia contra las mujeres, indicando que las políticas públicas y los programas implementados continúan siendo limitados y centralizados en área metropolitana y cabeceras departamentales.
Sobre los pueblos indígenas, subrayó que la tasa de mortalidad indígena causada por el Covid-19 fue tres veces mayor que en el resto de la población (12,7%) y de la población no indígena de 3,4%.
El director académico del Informe 2021, Hugo Valiente, habló de la urgencia de debatir un nuevo pacto fiscal que grave progresivamente a las grandes fortunas, y una renegociación del Tratado de Itaipú que anteponga el derecho del pueblo paraguayo a su autodeterminación y a beneficiarse de sus riquezas.
95% de las trabajadoras domésticas no cuentan con seguro del Instituto de Previsión Social (IPS), pese a la ley.
12,7% de los indígenas que padecieron de Covid-19 fallecieron. En la población no indígena el porcentaje es de 3,4%.
3 a 4 casos de desaparición de niños, niñas y adolescentes se dan por día. Se localizan a menos de la mitad.
La tasa de mortalidad indígena causada por el Covid fue tres veces mayor que en el resto de la población. Marcela Zub, investigadora.
Es urgente debatir un nuevo pacto fiscal que grave a grandes fortunas que se forman en el paraíso fiscal que es Paraguay. Hugo Valiente, director del informe.