Triste final. A cien días de la misteriosa desaparición de la universitaria guaireña Teresa Edith Lichi Rivero (20), el Ministerio Público confirmó que el cráneo hallado el pasado 6 de julio en las cercanías de un arroyo en Ñumí, Departamento de Guairá, pertenece a la joven estudiante.
Lichi desapareció desde el pasado 17 de abril de la localidad de Coronel Martínez.
Mientras, el principal sospechoso del caso, su exnovio, el abogado Guillermo Saúl Duarte, fue detenido ayer a la tarde cuando la Policía rodeó la vivienda de su abogado Fabio Ramos, donde se encontraba.
La captura del sospechoso fue emitida por el juez Vicente Elizaur. Posteriormente fue traído, anoche, a Investigación de Delitos de la Policía por medidas de seguridad, donde el fiscal Federico Delfino le imputó por homicidio doloso. Esta mañana debe acudir para declarar a la Fiscalía Antisecuestro.
El cráneo estudiado había sido hallado en las cercanías de una finca perteneciente a la familia del encausado.
Tras doce días de retraso de la entrega de los estudios, ya que se estimaba que se conocería en ocho días luego del hallazgo, en el Ministerio Público informaron que el resto óseo pertenece a la joven.
La Policía y el Ministerio Público revelaron el resultado durante una conferencia de prensa en la Fiscalía General.
RESULTADOS. El hallazgo del cráneo logró determinar que el cuerpo de la joven, pese a que todavía no se encontraron las demás partes, no fue enterrado por su victimario, sino que estuvo expuesto al aire libre, lo que aceleró el estado de descomposición.
No tiene señales de quemaduras ni de haber sido cercenado por su atacante, detalló un equipo odontológico y arqueológico.
Así también, se descartó que haya estado bajo agua.
La deducción es que los animales se habrían encargado de desmembrar los tejidos blandos, lo que produjo el descuartizamiento del cuerpo de la estudiante.
Si bien no se pudo determinar con exactitud el tiempo que lleva de fallecida, los datos estiman que sería de dos meses, aproximadamente, según Cañete.
La universitaria fue vista por última vez en abril pasado.
Según sus familiares, Teresa debía encontrarse con Duarte para dar por terminada la relación sentimental que tenían.
CÓMO SE LO VINCULA. Los investigadores refieren que el imputado fue la última persona que habló con Teresa Lichi y también la que tenía el chip de celular de la víctima, cuando ya estaba desaparecida. Esta situación permitió que el principal sospechoso sea procesado. El abogado recibió el repudio de los pobladores, quienes presenciaron su detención.
El Ministerio Público solicitará la unificación de la carpeta investigativa debido a que el primer proceso abierto fue por la desaparición y el último por hallazgo de cráneo con resultado de identificación. Ambos procesos por lo menos seguirán hasta tanto el juzgado disponga la unificación, informó la fiscala Artemisa Marchuk.
Los agentes de la sección de Homicidios de la Policía Nacional se encuentran al frente de la pesquisa. Los fiscales de la causa son Federico Delfino y Mirna Rivas, de Villarrica.