Esta iniciativa tiene como objetivo la implementación de buenas prácticas ambientales en los entornos escolares. El proyecto piloto, implementado entre 2021 y 2022, alcanzó con 4.774 alumnos en Central, Asunción y Coronel Oviedo.
Los estudiantes estuvieron involucrados en la reforestación, instalación de un sistema solar fotovoltaico, huertos escolares, construcción de lagunas para reutilización de agua e instalación de contenedores de manejo diferenciado de residuos en las escuelas.
María José Llamosas, coordinadora del proyecto, dijo que la exitosa implementación de la educación ambiental en las escuelas salesianas ha dejado lecciones valiosas, y por eso ‘‘seguimos avanzando en el camino de la conversión ecológica, formando buenos cristianos y ciudadanos responsables, comprometidos con el cuidado de la casa común.
Pero estas buenas prácticas no pretenden limitarse al espacio escolar, el objetivo es impactar en las comunidades locales en cada área de influencia de estas instituciones donde se implementará el proyecto.
David Núñez, del 3º año del Instituto Agropecuario Salesiano Carlos Pfannl, de Coronel Oviedo, comentó que cuentan con una unidad de producción bovina dentro de la institución que produce residuos orgánicos en gran cantidad. ‘‘Procesamos esta materia orgánica para reducir el impacto negativo que pueda tener en el ambiente. Luego aplicamos a la producción extensiva, en la producción de viveros forestales”, explicó.
La iniciativa está a cargo de la Sociedad Salesiana del Paraguay y la Fundación Antonia Ruut de Alemania apoyado por el Engagement Global y con financiamiento del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ) de Alemania.