El inicio del año lectivo 2025 se presenta con grandes desafíos en medio de preocupaciones por parte de los padres, docentes y directores que trabajaron la semana pasada encarando reparaciones y reacondicionando aulas para dar la bienvenida a los chicos.
En Asunción, a una semana de la vuelta a clases, durante una visita a la escuela y colegio República Argentina, Miguel Marecos, presidente del Sindicato Nacional de Directores (Sinadi), advirtió que la estructura del edificio está en muy mal estado y corre el riesgo de derrumbarse.
Con autogestión de los docentes, padres y exas, rifas y actividades de recaudación vienen evitando desde años que las instituciones caigan. La institución es parte de la lista de las 57 instituciones que necesitan una intervención completa y que está en licitación.
El propio ministro de Educación y Ciencias, Luis Ramírez, presentó hace un mes trabajo que se realiza para elaborar un plan de inversión hasta el 2030 de cara a la modernización en un total de 3.838 locales, pero mientras se sigue el proceso las urgencias son varias, desde la falta de servicios de distribución de agua, sistema eléctricos obsoletos y baños con letrinas.
Hoy tenemos instituciones que carecen de condiciones básicas para garantizar un entorno seguro y adecuado para el aprendizaje, principalmente en el interior del país.
‘‘Se está monitoreando el suministro de agua en ciertas instituciones, especialmente en la zona del Chaco, donde algunas aún dependen de fuentes inadecuadas como tajamares. También se están resolviendo problemas de electricidad y mejorando las instalaciones sanitarias, alcanzando un 90% de avance en la construcción de baños adecuados. Esperemos que resuelvan estas cuestiones a tiempo’’, dijo el titular de Sinadi.
coordinan mejoras. Desde hace un par de semanas, el ministro Luis Ramírez viene reuniéndose con intendentes y gobernadores para tratar el tema de infraestructura y que las intervenciones se realicen de manera coordinada sobre las necesidades puntuales y urgentes. El programa Hambre Cero en las escuelas, requiere dotar de espacios adecuados para que los niños y niñas almuercen.
La preocupación más importante frente al inicio de clases, dijo Miguel Marecos, es precisamente la construcción de un ‘‘comedorcito’’ en las instituciones que no tienen, y en aquellas que no tienen también cocina, porque de acuerdo al plan Hambre Cero, en algunos lugares se va a cocinar y en otros lados se lleva la comida hecha.
Plan. El Ministerio de Educación pidió que esta sea esta la prioridad de los jefes comunales y gobernadores en los primeros meses del año escolar. Hambre Cero pretende llegar a 1.000.000 alumnos este año.
Frente a los tantos problemas de infraestructura tras década de abandono, el MEC planificó la realización de un censo nacional de escuelas para mayo y así obtener una “fotografía” precisa de las condiciones actuales de las instituciones educativas. Este censo permitirá identificar las necesidades específicas de cada escuela y priorizar las intervenciones necesarias y que la ciudadanía pueda acceder a la base de datos sobre las necesidades en tiempo real y qué es lo que se está haciendo.
El ministro enfatizó la urgencia de estas acciones, señalando que se requiere una inversión sostenida de USD 500 millones anuales durante los próximos tres años para reparar adecuadamente al menos 1.000 escuelas por año.
Este año el MEC puso énfasis en el presupuesto para incluir ese rubro, porque arreglar algo que se cae es más costoso que construir o reconstruir. Se solicitó más de tres millones de dólares para reparación y mantenimiento.
Mientras los municipios y gobernaciones coordinan bajo delineamientos del MEC para seguir adecuando las aulas.