Tenían como destino Hong Kong, China, Australia e Irlanda, y estaban ocultos de manera ingeniosa en objetos, como un colchón inflable, en un tablero y piezas de ajedrez y en el forro de un termo con una guampa.
Los paquetes fueron verificados ayer en presencia del juez Gustavo Amarilla y el fiscal Carlos Alcaraz, donde se constató la incautación de 1,832 kg de cocaína. Esa cantidad ronda un valor total estimado de USD 150.000 en dichos mercados de consumo final, según informa un comunicado de la Senad.
El can detector de drogas Zack logró alertar a los agentes de la presencia de la droga que iba a Hong Kong, China y a Irlanda. Por ello, los antidrogas verificaron la encomienda. Mientras que el paquete que llevaba la droga a Australia fue detectado por el can Erick. Hasta el momento, no hay detenidos.