Desde que cesó el pago de unos 100.000 millones de dólares en el 2002, Argentina se mantuvo alejada de los mercados financieros. El viernes propuso un pago de unos 6.500 millones de dólares para terminar con la batalla legal con los bonistas conocidos como holdouts, y el Ministerio de Hacienda dijo que dos de los seis principales fondos holdout ya aceptaron los términos propuestos.
“Estamos muy esperanzados con la velocidad con la cual Argentina está resolviendo sus disputas con los holdouts”, dijo Shahriar Shahida, jefe conjunto de inversiones en Constellation Capital Management en Nueva York, que tiene bonos argentinos en su cartera.
“Esperamos que este Gobierno tenga una relación mucho más conciliatoria con todos sus acreedores”, dijo Shahida. REUTERS