El procedimiento se llevó a cabo en el interior de un minimercado situado en la entrada de la ciudad de Itá, Departamento Central, donde la joven Dahiana Espinoza prestaba servicios en el área de la carnicería.
Las sospechas de las autoridades apuntan ahora a quien sería su ex jefe, identificado como César Brítez, quien además de alquilar el área de la carnicería del local comercial también es propietario de una matadería en la misma localidad. La comitiva también inició un procedimiento en el sitio de faena.
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El comisario Rubén Paredes, jefe de la Brigada Central, comentó a NPY que hay evidencias que podrían vincularlo al caso. Sin embargo, no interiorizó en detalles para no entorpecer la investigación.
El Ministerio Público, por su parte, incautó el vehículo, el teléfono celular y un arma calibre 22 pertenecientes al hombre. Los investigadores también tienen en su poder el teléfono celular de la desaparecida, el cual fue entregado por su madre días atrás.
El jefe policial contó que la mujer entregó el móvil pensando que era de la pareja de su hija, Joel Guzmán, en vista de que fue él quien le acercó. Tras las pericias, se corroboró que el móvil era de Dahiana.
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La joven lleva siete días desaparecida, vivía en la ciudad de Itá, pero la semana pasada estuvo por la ciudad de J. Augusto Saldívar, junto con su hija, cuando la dejó para ir a trabajar el pasado viernes.
Lo último que saben es que salió con su compañero de trabajo, quien les manifestó que la misma se había subido en un vehículo y ya no supo nada más de ella.
Su pareja fue detenida días atrás, por hallarse algunos elementos en su vivienda, como rastros de sangre en un pantalón y una fotografía de la mujer.