La Fiscalía también imputó a los principales colaboradores en el lavado de dinero de Reinaldo Javier Cabaña Santacruz, alias Cucho. De esta forma los agente fiscales presentaron imputación contra los lavadores de la supuesta organización narco desmantelada en el Alto Paraná.
En el escrito de imputación solicitaron la declaración del estado de rebeldía de siete personas, de las cuales tres forman parte esencial de la estructura que estaría traficando cocaína vía aérea desde Paraguay hacia el Brasil.
El fiscal Hugo Volpe imputó por exportación e importación de estupefacientes, empleo ilícito de bienes, tráfico ilícito y delitos conexos, y violación de la Ley de Armas a Yamil Ramón Cabaña Santacruz y Rubén Cabaña Santacruz, ambos hermanos de Cucho.
Los otros imputados son Jorge David Brítez Riveros y Jorge De Jesús Ríos González, estos procesados por la comisión de exportación e importación de drogas, empleo ilícito de bienes y tráfico ilícito y delitos conexos.
Y por último los otros tres identificados como parte del esquema organizacional son José Pinto Apostolaqui, Tomás Escobar Pérez y Héctor Pastor Brizuela, imputados por lavado de dinero y tráfico ilícito y delitos conexos.
Informes. La investigación a través de la intercepción, registro y grabación de comunicaciones realizado por la Senad logró determinar las funciones de alguno de los prófugos. Pastor Brizuela fungía como una especie de secretario privado de Cucho.
Yamil Cabaña supuestamente trabajaba conjuntamente con Hugo Ríos en la coordinación de recepción y envío de cargamentos de cocaína. También sería el administrador de Adrena Fútbol.
En tanto que Pinto Apostolaqui era el encargado de mover los dólares que producía el tráfico, pues sería el administrador de la casa de cambios que tenía Cucho.
Todas estas personas ya cuentan con orden de captura.