Después del pago de subsidios correspondientes a los tres primeros meses del año, a unos 18.000 trabajadores suspendidos y en concepto de reposos, la previsional solo cuenta en caja con un saldo de USD 20 millones, de los USD 100 millones transferidos por el Gobierno en el marco de la Ley de Emergencia Nacional, durante el año pasado, por lo que ahora le urge una nueva transferencia de dinero de la cartera de Hacienda.
Pedro Halley, gerente de Prestaciones Económicas de IPS, expresó que precisan de por lo menos USD 50 millones más para poder seguir abonando las compensaciones en concepto de suspensiones y diversos tipos de reposo y aislamiento por Covid-19, que aumentan vertiginosamente en cantidad con la segunda ola de la pandemia.
“Nos reunimos con Hacienda y estamos empezando a negociar. Por supuesto, nosotros pedimos mucho más, siempre, pero precisamos como mínimo USD 50 millones para aguantar los gastos del segundo semestre y entregar también algo al sector de la atención de la salud, para la atención médica de los asegurados y de los no asegurados”, expresó.
Halley explicó que con la pandemia en su pico máximo de casos, también atienden los pedidos del Ministerio de Salud para la internación de los no asegurados, respondiendo a diversos convenios con el Gobierno. Al mismo tiempo, deben atender a los asegurados, cuyas patronales no aportan por ahora, debido a la crisis de la pandemia, y a los familiares de estos.