En el 2014 la Fundación Internacional de Supervivencia de la Nutria (IOSF, por sus siglas en inglés) estableció el 27 de mayo como el Día Mundial de la Nutria, con el fin de promover acciones de conservación de las 13 especies de nutrias que existen en el mundo.
Todas ellas se encuentran en la lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN).
En Paraguay habitan dos especies, una se encuentra bajo cuidado humano en el Centro Ambiental de Itaipú, que es conocida como lobito de río (Lontra longicaudis) o lobopé en guaraní.
Está distribuida en casi todo el país, en varios de los ríos y cuerpos de agua, como el Lago Ypacaraí y otros humedales. Esta especie suele ser solitaria, solo forma pareja para la reproducción y son más tímidas cuando se encuentran en vida silvestre, informaron desde la Itaipú Binacional.
Llegó al Centro Ambiental de la Itaipú Binacional en marzo del año pasado, producto de un decomiso del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) en la ciudad de Caacupé, en el Departamento de Cordillera.
La otra especie presente en el territorio paraguayo es la nutria gigante de río o Arirai (Pterenoura Brasiliensis), la cual habita en el Nnorte del país, en la región del Pantanal, en el río Paraguay y en el río Negro.
Es la especie de nutria más grande del mundo, vive en grupos familiares y es muy ruidosa. Todas las nutrias son animales semiacuáticos, que viven siempre asociadas a cursos de agua. Poseen pelaje impermeable y son excelentes nadadores. Son carnívoras y su alimentación está basada principalmente en peces.
Afectadas por pérdida de su hábitat
Las dos especies que viven en Paraguay se vieron muy afectadas por la pérdida de su hábitat, causada principalmente por la deforestación, cultivo no sostenible (utilización de pesticidas y fertilizantes).
El comercio ilegal (principalmente por mascotismo), el atropellamiento en rutas y la caza furtiva son otros factores que perjudican a estos animales. La Itaipú Binacional, en pos de la conservación, trabaja en el Centro Ambiental y en sus ocho áreas protegidas para cuidar a estos y otros ejemplares que forman parte de la biodiversidad.