Inmediatamente, se dio a conocer el documento con la firma de Fernández que data del mes de noviembre. Súbitamente, ayer el diputado no asistió a la Cámara y en su defensa acercó una serie de certificados médicos que hacen constar que tiene reposo por una reciente cirugía que no le impidió asistir a la plenaria la semana pasada.
Luego de que apareciera el comisionamiento del funcionario de la Senad, que constituía un grave hecho puesto que las investigadores fiscales le atribuyen un nexo con el esquema del narcotráfico liderado por Miguel Insfrán alias Tío Rico, las autoridades de la Cámara Baja liderada por Latorre se pasaron la pelota hasta que ayer sospechosamente apareció Fernández a dar llamativas declaraciones.
Justo también ayer se dio a conocer un documento de la Cámara Baja de noviembre de 2023 (ver fascímil) en el que los servicios del cuestionado funcionario fueron solicitados por el ex Cruzada Nacional, hoy cartista, Fernández.
Justificó el motivo por el cual solicitó el comisionamiento pese a que reconoció “no conocía” a Ruiz Díaz a aunque sí consideraba que por los conocimientos que portaba era el adecuado para asesorar a la Cámara.
En particular, pidió los servicios del funcionario para el estudio del proyecto que establece el control y regula al importación, exportación, plantación, cultivo, cosecha, producción, adquisición, almacenamiento, comercialización, distribución y consumo medicinal y recreativo del cannabis (marihuana) y sus derivados, proyecto que Fernández presentó.
Sin embargo, Fernández no integra la mencionada comisión, lo cual aumenta las sospechas. El agente fue comisionado a la Comisión de Lucha contra el Narcotráfico, Ilícitos Conexos, Graves y de Prevención de las Adicciones.
“Yo pedí por el señor, no por medio de ningún contacto. No necesitamos referencia cuando tiene años de experiencia. Es un supertécnico que tiene diplomas, no se puede negar y colaboró en nuestro proyecto”, refirió.
Fernández sostuvo que no conocía los antecedentes del funcionario en relación al supuesto vínculo con el caso Tío Rico. Algunos diputados afirman que Jatar es una ficha del cartismo con poca influencia, y a quien bien pudieron utilizar como chivo expiatorio y que otra persona había pedido realmente el comisionamiento.
El diputado Jatar Oso Fernández presentó varios justificativos médicos debido a su ausencia en la Cámara, precisamente, cuando saltó su nombre cómo el que solicitó servicios de un cuestionado jefe de inteligencia de la Senad en el cuerpo legislativo, quien luego fue descomisionado, a raíz del escándalo que propiciaron sus antecedentes. El último certificado médico que Fernández presentó fue del Sanatorio San Roque, cuyo médico es José Marín, y que firmó un reposo de 15 días. Fue porque “fue sometido a una cirugía y requiere una prolongación de su reposo por dos semanas a partir de la fecha”. El documento fue expedido el 27 de mayo. Se expidió el certificado luego de que el paciente consultara vía telefónica. Otro documento data del 24 de abril cuando a través del Centro Médico Santa Julia, se da detalle al cuadro de Jatar quien cuenta con antecedente por presión arterial. Hace constar que existía un plan de “cirugía bariátrica, con evacuación de riesgo cardiovascular”. Finalmente, consta en un documento del 28 de abril expedido por el Sanatorio Adventista que el diputado estuvo internado del 26 hasta esa fecha por haber sido sometido a cirugía.