El acto central se llevó a cabo en la Plaza de los Héroes de Asunción en la noche de este miércoles, donde jóvenes campesinos de diferentes departamentos, pertenecientes a la organización Juventud Paraguay Pyahurã (JPP), reclamaron tierra, educación y trabajo.
La marcha se desarrolló en la mañana desde la plaza O’Leary hasta las sedes del Instituto de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) y del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC).
Los manifestantes denunciaron la concentración de la tierra en poder de una minoría y que los jóvenes no tengan acceso a ella. Señalaron que esta es la causa de la migración, la falta de educación y la pobreza.
La dirigente de la JPP Benicia Chávez resaltó en su discurso que los jóvenes no tengan acceso a una educación gratuita ni de calidad. “El 55,6% de adolescentes y jóvenes no asiste a una institución educativa, o sea que más de 1 millón de jóvenes no acceden a la educación y eso es una vergüenza e injusticia”, expresó.
Chávez mencionó que solo las personas con mayor recurso económico reciben una enseñanza de calidad y gozan de buena infraestructura.
“Tenemos escuelas que se caen a pedazos, que se cierran, además se enseña bajo árboles a muchos niños, niñas y adolescentes, y eso es una lástima porque no debería ser así. En el programa de este Gobierno no hay una política de educación para los jóvenes pobres, sino que siempre es todo para la clase alta”, reclamó.
La dirigente lamentó que los jóvenes deban migrar en busca de oportunidades que no tienen dentro del país.
“El 43% de jóvenes son migrantes, y del total, el 54% son mujeres, quienes deben pasar por muchísimas irregularidades en sus trabajos, violencias sicológicas e incluso sexuales, son acosadas en sus lugares de trabajo, en sus colegios. Además, 500 a 700 niñas de 10 a 12 años quedan embarazadas anualmente, la mayoría principalmente producto de violencia y de abusos”, indicó.
Igualmente, denunció que no existan garantías para los trabajadores del campo. “Sembrar mandioca no tiene precio ni mercado; sembrar algodón no tiene precio ni mercado; sembrar tomate, locote, lechuga no tiene precio ni mercado. Y mientras tanto, unos cuantos empresarios se reúnen para hablar de cómo seguirán entregando nuestro Paraguay”, sentenció.
Por su parte, el dirigente Ernesto Ojeda reclamó que exista desigualdad entre los jóvenes y falta de oportunidades para desarrollarse en la producción. “Entonces, a un mes que asumió este nuevo Gobierno de Mario Abdo Benítez, le demostramos que estamos organizados y que vamos a luchar por nuestro futuro”, mencionó.
Ojeda habló de las dificultades de los jóvenes para estudiar en la universidad. “El acceso a la secundaria y a la universidad no es gratis ya que contempla altos costos, como transporte, comida, útiles, acceso a las tecnologías, uniformes y derecho a exámenes. No tenemos ganancias al estudiar, sino pérdidas y no debería ser así”, afirmó.
Lamentó también las carencias y malas condiciones en el ámbito laboral. “Nos encontramos en condiciones de inestabilidad, sin ganar el sueldo mínimo, más de ocho horas, sin aporte a la jubilación y sin seguro social, todo eso solamente por ser jóvenes”, dijo.
Finalmente, se quejó de la intención de imponer el servicio militar cuando existen “problemas muy profundos y graves en la educación, el trabajo y los miles y miles de jóvenes sin tierras”.
El dirigente concluyó instando a los jóvenes para luchar por su espacio y exigir al Gobierno mejores condiciones.