En una votación histórica, la cámara baja, donde los demócratas son mayoría, aprobó el 18 de diciembre dos cargos de acusación contra Trump: “Abuso de poder” y “obstruir el buen funcionamiento del Congreso”.
La lideresa de los demócratas en la Cámara, Nancy Pelosi, retrasó desde entonces el envío de la acusación al Senado en un intento de obtener garantías sobre la imparcialidad del juicio y más documentación. Los demócratas en particular le pidieron a McConnell que convocara a varios asesores de Trump, a quienes se les negó el derecho de testificar ante ellos.
Ayer Pelosi anunció que se votaría hoy el envío al Senado de las acusaciones contra Trump, que se considera un hecho. “Si eso sucede, daremos los pasos preliminares esta semana, que bien podrían incluir que el presidente de la Corte Suprema venga y juramente a los miembros del Senado y algún otro tipo de medidas de orden”, dijo McConnell. “Esperamos lograr eso por consenso, lo que nos prepararía para iniciar el juicio real el próximo martes”, detalló. AFP