El video muestra a Kelembu y sus amigos recorriendo las calles de Ciudad del Este, promocionando lo que considera “verdaderos atractivos turísticos": baches llenos de agua en donde se puede pescar, enormes zanjas en las veredas en donde es posible ocultarse para jugar a las escondidas o imitar a Rambo, grandes montículos de tierra lodosa con los cuales ellos fabrican “bodoque for export” y los ofrecen a 10 mil guaraníes la docena o a “5 reais a dúzia”, teniendo en cuenta el comercio fronterizo.
“Gracias a nuestra intendenta tenemos lugares para pescar y jugar. Ojalá otros municipios copien y les den a sus ciudadanos un lugar de recreación”, dice, satirizando a la intendenta municipal de Ciudad del Este, Sandra McLeod y a su esposo, el caudillo colorado Javier Zacarías Irún. A ambos los menciona como miembros del “clan Zacarías”, del cual también formaría parte el actual gobernador de Alto Paraná, Justo Zacarías Irún.
Un empresario convertido en dirigente social.
Kelembu es un personaje estrafalario, que se ha vuelto muy popular en las calles de Ciudad del Este, capital del Alto Paraná.
Se presentó oficialmente como candidato a intendente municipal en dos oportunidades, para concejal municipal en dos oportunidades y la última vez para gobernador. En ninguna de ellas resultó electo, pero le aportó un divertido aire de humor y picardía a la política esteña: en las elecciones del 2013 inscribió como su primer candidato a concejal a un burro llamado Ceferino.
“Actualmente no estoy en campaña. No estoy en campaña, sino en una lucha social contra estas personas que manejan nuestra ciudad, pero no descarto una candidatura para intendente, si se da el escenario político. Por ahora estamos luchando nomás contra esta gente, para ver si el Gobierno central nos hace caso e inicia una intervención a la Municipalidad de Ciudad del Este, tras 15 años de grandes irregularidades”, destaca.
Kelembu aparece casi siempre descalzo, vestido con ropas rotosas, con un traje con diversos remiendos y sombrero pirí a la cabeza.
Detrás del personaje se oculta en realidad el empresario Celso Miranda, propietario de una conocida casa de venta y representación de productos de informática en Ciudad del Este.
“El apodo Kelembu me lo puso la gente en una de las campañas, cuando me veían recorrer los barrios en un carrito tirado a caballos, tipo karumbé. '¡Koa la ñane candidato kelembu hina!’, me gritaban. Ahora ya todos me identifican así, y la gente vibra, los niños hacen fiesta cuando me ven en los barrios”, destaca.
Kelembu se traduce del guaraní popular como “algo poco serio”, pero Miranda asegura que para él no es un apodo despectivo, y lo lleva con orgullo “porque representa al pueblo, a la gente trabajadora y sencilla, a esa mayoría a la que los políticos solo tienen en cuenta a la hora de pedirle su voto y después se olvidan. Yo no voy a olvidar, porque soy un kelembu, como la mayoría”.
Un político y empresario de origen humilde.
Miranda nació en CDE, en el seno de una familia muy pobre. “A temprana edad quedé huérfano de padre y tuve que salir a trabajar como lustrabotas, canillita, chipero, limpia coches, y ambulante vendiendo linternitas, yo-yo luminoso, la pomadita china conocida como ‘levanta pau’, camisiña musical y finalmente me hice mesitero, para mantener a mi mamá viuda y mis hermanitos”, relata.
Se convirtió en empresario, pero le gusta seguir andando descalzo y con sombrero campesino. “Que hoy me vaya bien no significa olvidarme de la gente que necesita. Por eso quiero ser intendente, para darles mejores oportunidades a mis conciudadanos más humildes”, alega.
Kelembu es colorado, pero dice estar desencantado de los dirigentes de su partido. Por eso creó un movimiento ciudadano independiente, denominado Oportunidad para Todos (OPT). Tiene una larga experiencia como dirigente vecinal en su barrio, Emiliano R. Fernández, uno de los más populosos y humildes de CDE.
“Estoy acostumbrado a trabajar con la gente, codo a codo, para solucionar problemas cotidianos como la falta de agua, el empedrado de una calle o la construcción de una plaza. No se necesita ser un gran doctor para conocer lo que el pueblo necesita”, destaca.
Con respecto al video realizado, destaca que es un trabajo creativo hecho con sus amigos y miembros de su equipo, buscando transmitir el humor popular como parte de sus críticas a los actuales gobernantes esteños.
“Esta es una acción de la ciudadanía, de la que yo formo parte. Aquí hay trabajadores taxistas, que este miércoles irán en una manifestación, de que también participan los trabajadores de la vía pública, como los mesiteros ambulantes y los mototaxistas, que están siendo avasallados y perseguidos en su derecho de trabajar. Kelembú solo es un vocero de todos ellos”, asegura.