Documentos divulgados hoy por la organización no gubernamental estadounidense “The National Security Archive” muestran que Kissinger dio esa orden el 16 de septiembre de 1976.
Cinco días más tarde un atentado con auto bomba en Washington acabó con la vida del ex canciller chileno Orlando Letelier y su secretaria estadounidense de 26 años Ronni Karpen Moffitt, mientras conducían por la Avenida Massachusetts de la capital estadounidense.
“The National Security Archive” señaló en un comunicado en su página web que ese atentado sigue siendo el acto más “infame” de los aliados en la Operación Cóndor, una operación que integraron en la década de los setenta los servicios de inteligencia militares de Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil, Chile y otros países latinoamericanos.
El objetivo de la citada operación era localizar y asesinar a los opositores a los citados regímenes.
El secretario “ha instruido que no se tomen acciones adicionales en este asunto”, señala un telegrama enviado el 16 de septiembre de 1976 desde Lusaka, la capital de Zambia, donde Kissinger se encontraba en esos momentos.
Las instrucciones dirigidas al entonces secretario de estado para asuntos interamericanos, Harry Shlaudeman, pusieron fin a una orden dada por el propio Kissinger tres semanas antes.
La orden inicial buscaba que altos funcionarios del Departamento de Estado hicieran llegar a los jefes de Estado de Chile, Argentina y Uruguay su “profunda preocupación” por los “planes para el asesinato de elementos subversivos, políticos y figuras destacadas dentro de algunos países del Cono Sur y en el extranjero”.
Ese mensaje nunca llegó a ser entregado.
“El telegrama del día 16 es la pieza que faltaba del rompecabezas histórico sobre el papel de Kissinger en la acción y la falta de acción del Gobierno estadounidense tras tener conocimiento de los planes de asesinato Cóndor”, afirmó en un comunicado Peter Kornbluh, analista de la citada organización no gubernamental.
Kornbluch es autor del libro “The Pinochet File: A Declassified Dossier on Atrocity and Accountability (El Archivo Pinochet: Un expediente desclasificado sobre la Atrocidad y la Responsabilidad)”.
El analista señala que los nuevos documentos permiten finalmente saber lo que ocurrió.
“El Departamento de Estado inició un esfuerzo oportuno para frustrar la campaña de asesinatos en el Cono Sur y Kissinger, sin dar explicaciones, la abortó”, afirmó Kornbluch.
En su opinión, la decisión de Kissinger de cancelar la advertencia a las naciones Cóndor impidió que se enviara un mensaje diplomático de protesta que “pudo haber disuadido un acto de terrorismo” en la capital estadounidense. EFE