“Declarar patrimonio a la caravana motorizada garantiza que la actividad sea objeto de protección, defensa, investigación y conservación”, dice el acuerdo del Ministerio de Cultura.
La caravana debe su nombre al apodo de Rubén Villadeleón “El Zorro”, que fue su creador en 1962 y falleció en 1987, pero su hijo Eddy, de 63 años, mantiene viva la tradición.
Más de 35.000 guatemaltecos harán rugir los motores de sus motocicletas mañana en la Plaza de la Constitución, en el Centro Histórico de la capital y partirán a Esquipulas, la tierra de la fe católica de este país centroamericano.
La peregrinación motorizada, que se realiza en un sólo día, es considerada como la más grande de Latinoamérica.
Ataviados con gorras y chaquetas negras, los motociclistas se aventuran en un recorrido de 222 kilómetros por toda la carretera al Atlántico hasta el Templo del Cristo Negro de Esquipulas, para lo que muchos toman unas diez horas de tiempo.
La primera peregrinación la hizo Rubén Villadeleón con seis amigos, según recuerda su hijo, pero desde hace una década son más de 30.000 los que hacen la romería en motocicletas.
Está previsto que el vicepresidente de Guatemala, Rafael Espada, un amante de las motocicletas, y el arzobispo Oscar Vian despidan mañana la caravana frente a la Catedral Metropolitana.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) informó hoy que se declarará desde esta noche en una alerta naranja (prevención) e instalará dos campamentos en la carretera al Atlántico para dar asistencia a los motociclistas.
También el Ministerio de Salud Pública, además de los cuerpos de Bomberos y la Policía, instalarán puestos en la carretera para dar ayudar a la multitudinaria peregrinación.