El fin de semana la recolección de granos estuvo dinámica en zonas donde el clima seco permitió, pero hay áreas que siguen recibiendo lluvias, especialmente en Alto Paraná, donde las maquinarias no están pudiendo ingresar, explicó el vicepresidente de la Asociación de Productores de Soja, (APS), Karsten Friedrichsen.
Con este movimiento se estima que la cosecha alcanzó entre el 25 y 28%, nivel que podría llegar a la mitad al finalizar la semana. De acuerdo con las perspectivas climáticas, las lluvias persistirán en los próximos 8 días, si se dan de forma pausada no representa mayores inconvenientes, pero si las lluvias caen de manera ininterrumpida no solo impedirán el ingreso de maquinarias pesadas a las parcelas, sino que también amenazan a la calidad de los granos, los cuales pueden pudrirse o germinar por el exceso de humedad.
“Tenemos ahora prácticamente dos semanas para poder llegar al 85% si el clima permite y sigue habiendo días de cosecha”, detalló Friedrichsen.
Rendimientos. Hasta ahora se habla de una producción de 2.700 kilos por hectárea y aunque el volumen podría mejorar en las siguientes semanas, la APS considera que no superaría los 2.800 kilos y que al finalizar la campaña, la oferta total estaría en alrededor de 8,5 millones de toneladas.
Precios en finca están en USD 520
Las ventas anticipadas que se realizaron el año pasado, incluso antes del inicio de la siembra de soja, tuvieron un precio de entre USD 490 y 500 por tonelada para el productor; es decir, descontando los gastos de logística.
Con el avance de la cosecha y la disponibilidad de granos físicos, los agricultores están cumpliendo esos contratos con los exportadores de oleaginosas y simultáneamente están comercializando el resto del volumen con buenas cotizaciones, que van a USD 520 en las fincas, teniendo en cuenta que los valores en la Bolsa de Chicago están en torno a USD 550 por tonelada.
“No se está especulando mucho, el precio está regularmente alto”, dijo al respecto Karsten Friedrichsen.
