La película Romper el círculo, adaptación del libro It Ends With Us de la escritora Colleen Hoover, despegó en los cines con fuerza en su primer fin de semana de estreno en los Estados Unidos, pero también destapó un drama que surgió detrás de cámaras: La discordia entre Blake Lively y su coprotagonista Justin Baldoni, quien también ocupó el puesto de director.
Los rumores del conflicto –que surgieron en el set– se dispararon durante toda la campaña de promoción de la cinta y, sobre todo, en la premier, en donde la popular actriz no posó en ninguna fotografía con el actor de Jane The Virgin.
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Mientras que Baldoni aparecía dando entrevistas en forma individual y apartado de todo el elenco del rodaje, que junto con Lively no lo siguen en Instagram, según informó The Hollywood Reporter.
¿Qué provocó la fractura?
Recibí las noticias en tu celular, unite al canal de ÚH en WhatsAppMedios especializados señalan que hubo malos tratos y marcadas diferencias en el proceso de posproducción entre ambos actores, quienes poseen carreras muy sólidas en la industria.
En las redes sociales, incluso los usuarios realizaron comentarios sobre la injerencia de Ryan Reynolds para llevarse el control creativo de la película, teoría que se encendió cuando Lively reveló que su esposo escribió una escena clave en la azotea hacia el comienzo del filme.
Otras fuentes describen a Baldoni como “poco profesional” y que demostraba un compartimento tóxico, muy similar a su propio personaje; además, la revista Hola publicó que ambos fueron vistos discutiendo acaloradamente en varias ocasiones.
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La atmósfera subía de temperatura cuando Lively y Baldoni tenían que grabar escenas juntos.
En una entrevista con Entertainment Tonight, el director dio muestras de que no estaría en la secuela de la película, ya que destacó que “hay personas más indicadas para esta tarea, y me parece que Blake Lively está lista para dirigir”.
"¡Es una película sobre violencia de género, no romántica!”
La forma en que se está promocionando la cinta también está en el centro de la polémica y hasta parece dividir a los fans de la actriz de Gossip Girl.
La cinta retrata el amor, la violencia de género y la residencia de una mujer que busca romper un círculo tóxico, temas muy sensibles y complejos; pero se vende como si fuera una comedia romántica, según reprocharon varios internautas.
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Las críticas van directamente a Lively, quien promocionó la película con un despliegue de vestuarios, manicura y accesorios de inspiración floral; cocinando galletas de chocolate y hasta con una entrevista jocosa de Reynolds a Brandon Sklenar, quien interpreta al interés amoroso de Lively en la cinta.
