El comisario jefe de la Policía del condado escocés de Dumfries y Galloway, Patrick Shearer, subrayó que “el caso sigue abierto”.
Foto de archivo del atentado contra un avión de la compañía estadounidense Pan Am que sobrevolaba Lockerbie. EFE/Archivo | Ampliar imagen
Anteriormente, el dominical “The Sunday Telegraph” había publicado que la Policía había reabierto el caso del atentado de Lockerbie (Escocia), y que examina “varias líneas posibles de investigación”.
A ese respecto, Shearer dijo que “las informaciones de que la Policía ha relanzado la investigación son imprecisas”.
“La tarea que se ha emprendido es la última de una serie de revisiones que forman parte de una estrategia investigadora para mantener nuestra determinación de seguir todas las pistas posibles”, con el objetivo de “identificar nuevas líneas de investigación que pueden explorarse”, explicó el jefe policial.
El diario ha tenido acceso a un correo electrónico enviado por la Fiscalía General de Escocia (Crown Office) a los familiares de las víctimas británicas para informarles de la nueva pesquisa.
Según el diario, las autoridades han ordenado revisar las pruebas del caso después de que al-Megrahi, único condenado por el atentado contra un avión de la compañía estadounidense Pan Am que sobrevolaba Lockerbie, anulara un recurso de apelación contra su condena.
Al-Megrahi, de 57 años, tomó esa decisión como parte de un supuesto acuerdo para su polémica excarcelación, decretada el pasado agosto por el Gobierno escocés por motivos humanitarios, ya que padece cáncer de próstata en fase terminal.
En el citado correo electrónico, Lindsey Miller, fiscal que participó en el juicio contra el libio celebrado en 2001, afirma que “ahora que los procedimientos de apelación han acabado, una revisión del caso se ha puesto en marcha y varias posibles líneas de investigación se están considerando”.
Miller añade que “no sería apropiado” entrar en detalle sobre esas líneas de indagación.
Por su parte, Patrick Shearer confirmó que “ahora que el señor Megrahi ha abandonado la apelación contra su condena, una nueva revisión se ha puesto en marcha en relación con otros que actuaron con él en el asesinato de 270 personas”.
El comisario agregó que las fuerzas del orden toman nota de la opinión de la Fiscalía durante el juicio de que al-Megrahi, que siempre ha negado su responsabilidad en la masacre, “actuó en apoyo del Servicio de Inteligencia Libio y no actuó solo”.
De acuerdo con el periódico, cuatro detectives de policía están trabajando a tiempo completo en el caso.
La noticia fue bien recibida por los familiares de las víctimas británicas, muchas de las cuales dudan de la culpabilidad de al-Megrahi en un ataque que acabó con la vida de 259 personas en el avión de la Pan AM -que volaba de Londres a Nueva York- y once más en la localidad de Lockerbie.
Pamela Dix, que perdió a su hermano Peter en el atentado, comentó que “esta nueva investigación nos da nueva esperanza”, ya que “la situación no se ha resuelto y es un asunto pendiente”.
Además, miembros del grupo “UK Families Flight 103", que defiende los intereses de las víctimas británicas, han enviado una carta al primer ministro del Reino Unido, Gordon Brown, para pedir una investigación independiente del siniestro y una reunión con él.
“Hemos esperado pacientemente durante casi 21 años para saber toda la verdad de lo sucedido. Ahora esperamos la respuesta del primer ministro, Gordon Brown, a nuestro nuevo llamamiento para que haya una investigación completa sobre las circunstancias del atentado”, subrayan los firmantes de la misiva.
Un portavoz de Downing Street confirmó la recepción de la carta y prometió una pronta respuesta, mientras el ministro de Exteriores, David Miliband, comentó que la apertura de una investigación es “asunto de los escoceses”.
La excarcelación de al-Megrahi suscitó duras críticas por parte de la comunidad internacional, en especial de Estados Unidos, de donde eran originarias 189 de las víctimas del atentado.
También provocó un enorme indignación el multitudinario recibimiento que se le dispensó al terrorista a su llegada a Trípoli.