La circulación masiva de armas en la región despertó la alerta de la Policía de Brasil que en 2020 abrió oficialmente la investigación. Las autoridades del vecino país estaban seguras de que todo salía de Paraguay, pero necesitaban seguir un hilo conductor, por lo que pidieron informes de inteligencia, reveló a ÚH una fuente institucional.
La confirmación se da cuando encuentran un número de serie de un arma y logran identificar que es una importación paraguaya que ingresó legalmente al país; provenía de Turquía y de la ciudad de Dakovo (Croacia), que da nombre al operativo. Ninguna provenía de Estados Unidos, que ya para ese entonces había prohibido el comercio de armas al Paraguay.
El relato de la fuente indica que Brasil siguió las averiguaciones y una de sus herramientas fue el convenio de ese país con la empresa Meta, dueña de Facebook, Instagram y WhatsApp, a la que mediante resoluciones judiciales pidieron las ubicaciones y números de contacto de las personas que formaban parte de la red de tráfico. Una vez recibido el informe, notaron que la mayoría se encontraba en Paraguay. “Hubo escuchas, mensajes, informes de inteligencia de lugares importantes, uniformados que tuvieron que mimetizarse”, expresó la persona informante.
El momento en que Estados Unidos comienza a involucrarse en el operativo fue cuando se identifica que el dinero que circulaba era del Estado de Florida.
Brasil ya contaba con la orden de extradición del principal responsable, pero tuvieron que esperar porque el objetivo era romper la estructura.
Una dificultad fue que Brasil no estaba listo porque estaban en pleno proceso de cambio de gobierno, se retiraba Jair Bolsonaro y entraba Lula da Silva.
Para las instituciones de Paraguay fue más complicado el operativo porque contaban con bajo presupuesto. Cuando llegó agosto, pidieron junto con los brasileños que los militares nacionales no sean cambiados de sus puestos para no arriesgar las operaciones.
El cambio del director de la Dirección de Material Bélico (Dimabel), Aldo Ozuna, se dio recién en junio del 2022, luego de conocerse que la institución hizo una concesión directa a una firma brasileña. En su lugar asumió el general Roberto Manuel Piñánez Ciancio.
Sin embargo, las operaciones de la red de tráfico continuaron porque todo se manejaba “en los mandos medios”.
El operativo. La Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) inició el pasado martes la Operación Dakovo, que busca desbaratar una red internacional de tráfico de armas. El trabajo se lleva a cabo junto con Brasil y Estados Unidos.
Según la investigación, las armas eran importadas desde Croacia, Turquía, República Checa y Eslovenia de forma legal al Paraguay, pero una vez que eran remarcadas, pasaban al Brasil en manos de facciones criminales.
Dimabel funcionaba como el brazo principal dentro de la organización criminal de tráfico internacional de armas que tiene como cabeza de operaciones a la importadora International Auto Supply SA.
En los eslabones de la red están vinculados directores y altos jefes de la Dimabel, funcionarios públicos, cambistas y empresarios. Se estima que 43.000 armas introdujeron al mercado ilegal, negocio que generó USD 240 millones.
La red criminal funcionaba con dólares de empresas de fachada en los Estados Unidos, donde también se han emitido órdenes de captura.
Brasil emitió a través de los conductos diplomáticos un mandato de orden de captura internacional contra Diego Dirisio con fines de extradición. Se trata del principal articulador del esquema de tráfico de armas internacional que reveló el operativo Dakovo. En total fuerona detenidas 16 personas.