La Sociedad de Explotación de la Torre Eiffel (SETE) anunció este martes que el dispositivo permitirá garantizar a sus visitantes descubrir el monumento en “condiciones óptimas”.
Los test serán gratuitos para los visitantes franceses, pero los extranjeros no residentes en Francia tendrán que pagar 25 euros para hacerlo.
El monumento sigue así las instrucciones del Gobierno que obliga a todos los centros culturales de Francia –como cines, museos y teatros– que acogen a más de 50 personas a pedir a sus clientes la presentación de un documento que acredite la pauta de vacunación completa o una prueba negativa de las 48 horas anteriores.
Lea más: La Torre Eiffel reabre al público tras 8 meses de cierre por la pandemia
Esta medida entra en vigor este miércoles por decreto mientras que los parlamentarios deben votar esta semana el proyecto de ley que obligará a cafés, restaurantes, algunos centros comerciales y medios de transporte de largo recorrido a exigir desde agosto dicho documento a sus visitantes.