Esta región, que representa la intersección de culturas, tradiciones y paisajes naturales, refleja también los contrastes en el desarrollo económico y turístico de cada ciudad.
Mientras en el lado de Brasil y Argentina, en los hitos, se despliegan proyectos ambiciosos que transforman el lugar en un centro vibrante de atracción, el lado paraguayo parece permanecer anclado en las promesas y el letargo.
Del lado brasileño, el Marco das Três Fronteiras se ha consolidado como un ejemplo de cómo la gestión privada puede revitalizar un espacio turístico y convertirlo en un polo de atracción regional. La concesión a Grupo Cataratas, una empresa especializada en la administración de parques y atracciones, ha generado resultados notables. La empresa, reconocida como una de las mejores para trabajar en Paraná según Great Place to Work (GPTW), ha transformado el lugar en un destino imperdible para los visitantes de la Triple Frontera.
Recibí las noticias en tu celular, unite al canal de ÚH en WhatsAppEl lugar no solo ofrece vistas panorámicas de la confluencia de los ríos Iguazú y Paraná, sino que envuelve a los turistas en una experiencia cultural y gastronómica completa. Restaurantes que destacan la cocina regional, espectáculos como La leyenda de las cataratas y presentaciones de tango, samba y polca enriquecen cada visita.
La integración del arte, la cultura y la naturaleza ha sido clave para atraer turistas y dinamizar la economía local. Las cifras hablan por sí solas: el número de visitantes ha superado las expectativas, consolidando al Marco das Três Fronteiras como uno de los atractivos más importantes de Foz do Iguaçu.
EXPANSIÓN. La colaboración entre el Grupo Cataratas y la Municipalidad de Foz de Yguazú ha permitido no solo la revitalización del espacio, sino también su expansión. Para 2025, se espera que el Marco se integre al nuevo Espacio de las Américas, un centro cultural y turístico que promete fortalecer aún más la economía local y atraer más visitantes internacionales.
En Argentina, el hito Tres Fronteras en Puerto Iguazú conserva su encanto natural y su atractivo turístico. La plataforma mirador ofrece vistas espectaculares del río Paraná y del icónico obelisco tricolor que simboliza la unión de las tres naciones. Aunque el show de luces y aguas danzantes fue descontinuado, el lugar sigue siendo un punto de paso obligado para los turistas que llegan a la región.
El corredor de productos artesanales y la oferta de recuerdos locales complementan la experiencia de los visitantes. Aquellos que recorren el lugar pueden adquirir artesanías y productos autóctonos, promoviendo así el trabajo de comunidades locales. La plataforma, además, ofrece una de las vistas más privilegiadas del atardecer sobre el Paraná, convirtiéndola en un punto ideal para capturar fotografías memorables.
