El musical Reina de la Paz, una puesta dirigida por Grisel Viveros, se presentó anoche en el Teatro Municipal, ante una importante concurrencia de público.
Durante una hora, el entretenido montaje infanto-juvenil propuso buena música, pasajes teatrales y cuadros de danza de principio a fin, de la mano de unos 70 artistas en escena, con miembros del elenco ValorArte, Ballet Rytmo y Danza, y el grupo Shalom.
En escena se recrea la historia de una joven que, tras dejar sus rezos de la infancia, descubre un mundo cargado de placeres que la alejan de Dios. Un día, una voz le recuerda la importancia de la oración, a través de un mensaje de la Virgen Reina de la Paz. Luego, toda la obra transcurre con escenas del santo rosario a través de los misterios gozosos, luminosos, dolorosos y gloriosos.
Así, un elenco infantojuvenil encarna pasajes como la anunciación a María por parte del ángel, el nacimiento de Jesús en un pesebre, su bautismo, su juventud en una boda de Caná y su última cena. También se recrean momentos dramáticos, como el sufrimiento de Cristo en Getsemaní, su juzgamiento ante Poncio Pilatos y Herodes, y su crucifixión. Antes del cierre, Jesús es glorificado con su resurrección y músicas de alabanza, para finalmente mostrar un mensaje de clamor e invitación a la oración.
Estos animados cuadros, tanto alegres como dramáticos que entretuvieron al público, estuvieron cargados de músicas modernas y antiguas, con ritmos hebreos, pop, rock, charleston, baladas y canciones de alabanza.