Alrededor de USD 700 millones de ingreso económico al país serán restados a causa de las importantes pérdidas en el rendimiento agrícola. Esto se debe, en gran medida, a las fuertes sequías que atraviesa la región, según afirmaciones de Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP).
La cantidad de agua almacenada en la superficie de Itapúa y Alto Paraná, que son los departamentos con mayor producción de soja, disminuyó completamente este mes, según un estudio geosatelital realizado por técnicos del Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbío). Esto, sumado al fuerte estrés hídrico que atraviesa la región, refleja un panorama bastante desalentador para el sector productivo, ya que la productividad de la cosecha continúa empeorando a causa del clima.
El mapa muestra cómo descienden los niveles de humedad desde principios de diciembre hasta el mes de enero, y a su vez indica los focos de sequía en los departamentos de todo el país. “Se perfilaba un buen año para la cosecha, pero debido a este problema estaremos muy por debajo de las 10 millones de toneladas alcanzadas el año pasado, estaremos aproximadamente en 8 millones de toneladas de producción total, y eso significa unos USD 700 millones menos en ingresos económicos para el país”, manifestó el ingeniero.
Alegó que los bajos precios en la bolsa, por el conflicto entre Estados Unidos y China, hacen que el panorama empeore, ya que, en el país, un buen año económico se define de acuerdo con la cosecha agrícola.
“Para paliar esta situación de la mala cosecha, los productores habían apostado a la soja zafriña, pero el clima tampoco está ayudando a que esa siembra se realice, así que esperamos lluvias por lo menos para los próximos días”, indicó.