Así lo destacaron este jueves en una conferencia de prensa en la Embajada de Paraguay en Uruguay los directores nacionales de Aduana de Paraguay, Julio Fernández, y de Uruguay, Jaime Brigioni, así como el ministro del Interior de Uruguay, Luis Alberto Heber.
“La idea es que la Aduana de Uruguay tenga toda la información de las cargas que salen de Paraguay con anticipación, entonces obviamente la revisión se hará en Paraguay y se hará también en Uruguay y también lo estamos previendo para Argentina”, indicó Fernández.
Según el paraguayo, a lo que se busca también “avanzar” en la cooperación con los países de destino final de las cargas, tener “información precisa” es clave para reducir “el riesgo de contaminación”.
“Los escáneres que hay en Paraguay, que son nueve, van a compartir las imágenes con la Dirección de Aduanas de Uruguay. Esto es más controles para que no estemos presos de una falla humana, intencional o no”, precisó además Heber en diálogo con la prensa.
Según el ministro, si bien el país ya definió la compra de tres escáneres para aumentar la capacidad de revisión de los contenedores que llegan, principalmente, al Puerto de Montevideo, esta solución es importante hasta que esos escáneres lleguen hacia fines de 2023 o comienzos de 2024, pues de momento solo se cuenta con uno operativo.
Si bien señaló que en Paraguay, país que requiere de puertos de ultramar para la salida de su mercadería, hay ocho escáneres grandes y uno pequeño funcionando, Fernández precisó que “hay una congestión muy grande de imágenes” y servirá para reforzar el monitoreo.
“Tenemos que trabajar en equipo porque no es solamente tomar la imagen, cada imagen es como una radiografía que hay que interpretar, no necesariamente está muy clara para detectar la existencia de droga o de cocaína. Obviamente se requiere tiempo y capacidad y gente”, enfatizó.
Por otro lado, con respecto al decomiso de 10 toneladas de cocaína en una carga que llegó al puerto de Hamburgo (Alemania) proveniente de Sudamérica, que está siendo investigado por la Justicia de ambos países y que tuvo un pasaje por el Puerto de Montevideo, el director de Aduanas paraguayo confirmó que la droga fue introducida en su país.
“La primera hipótesis fue que se contaminó por el camino pero cuando revisamos bien nuestras imágenes encontramos que definitivamente fue en Paraguay”, reafirmó, y añadió que si bien hay una sola identificada las investigaciones apuntan a que son varias las personas responsables del ilícito.
A lo que tanto Heber como Fernández resaltaron que en este caso hubo “una falla humana” y no tecnológica, lo que da lugar a mejoras con mayor control, Brigioni aseguró que en Uruguay, donde el contenedor hubo 12 horas, “no había indicios” que justificaran examinarlo pero que, incluso con un único escáner que resultó dañado, la Aduana “no deja de controlar”.
Asimismo, recalcó Fernández, en países desarrollados como Estados Unidos y las naciones de Europa a las que llega la droga “el porcentaje de escaneo de los millones de contenedores llega al 1 %, a veces menos”, por lo que los esfuerzos recaen más en Sudamérica.
“Lo que tenemos es que evitar ser mirados de vuelta como contaminadores, pero el crimen va a buscar otras rutas. La idea es que de acá del Cono Sur no vuelva a salir”, redondeó. EFE