Es un trabajo del grupo de Investigación de Biomateriales, Biomecánica e Ingeniería de los Tejidos de la Universidad Politécnica de Cataluña, que en un 60% está formado por mujeres.
En el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, la doctora en Física Maria-Pau Ginebra demanda “más apoyo económico para la ciencia y la investigación que nace en las universidades” y que “revierte en el bienestar de la sociedad”.
Desde diciembre pasado, Ginebra estudia las interacciones entre biomateriales y bacterias y desarrolla superficies capaces de combatir infecciones a la vez que promueven la regeneración ósea.
El European Research Council le ha concedido una subvención del programa Advanced Grant, que son las que permiten a los directores de investigación reconocidos como excepcionales desarrollar sus estudios.
Esta investigación, dijo, “tendrá gran impacto científico y tecnológico en campos muy diversos como la catálisis y su aplicación médica, la purificación de agua y la separación de proteínas”.
Una de las aplicaciones puede ser en el campo de la cirugía ortopédica y maxilofacial, donde las infecciones bacterianas son uno de los grandes retos, una grave amenaza mundial para la salud, que llega a causar más de un millón de muertes al año, señaló la científica.
Con el fin de buscar soluciones, Ginebra desarrolla injertos de huesos sintéticos con superficies bactericidas por contacto, utilizando estrategias inspiradas en los procesos naturales.
También en el seno del mismo grupo de investigación, la licenciada en Ciencias Químicas Cristina Canal avanza en el desarrollo de una nueva terapia que evita los efectos secundarios de tratamientos como la quimioterapia, y que permita, a la vez, la regeneración ósea tras la extirpación de un tumor en los casos de osteosarcoma o cáncer de huesos.
Para ello, investiga en un producto que, por primera vez, une biomateriales para la regeneración ósea con un tratamiento innovador basado en hidrogeles tratados con gas plasma, que inducen la muerte de las células cancerosas.
Finalmente, otra de las investigadoras del mismo grupo, la profesora de Ingeniería Marta Pegueroles, desarrolla una solución para la coartación aórtica infantil a partir de la aplicación de un nuevo ‘stent’ cuyo objetivo es reducir o eliminar las intervenciones quirúrgicas.