Así lo asegura el ingeniero Luis Rotela, presidente de la Asociación de Empresas Constructoras (Asecon), que trabaja con el MUVH. El titular del gremio afirma que la ley del Fondo Nacional de la Vivienda Social (Fonavis) les permite a las pequeñas constructoras trabajar bajo “un mecanismo muy flexible que facilita el proceso de construcción para pequeños lotes, de forma rápida y sin mucha burocracia”.
Rotela descartó que los procedimientos sean “poco transparentes” –según afirma la Cámara Paraguaya de la Industria de la Construcción (Capaco) y otros sectores– y asegura que gracias al Fonavis solo pueden trabajar empresas registradas ante el MUVH y que tengan una solidez basada en un “ratio financiero”, construyendo casas en un plazo máximo de 180 días, muy inferiores a los establecidos por la ley de Contrataciones Públicas.
El gremialista explicó, además, que la construcción de casas en el marco del Fonavis no tiene costo adicional y no está sujeta a adenda, como lo permite la ley 2051/2013 (de Contrataciones Públicas), en donde se puede aumentar hasta el 20% del valor del contrato original para incluir modificaciones y que generalmente terminan utilizando.