De acuerdo con las informaciones que se filtraron, a cada uno de los 45 senadores y los 80 diputados se les otorgarían G. 1.100.000 para el seguro médico, y además G. 5.000.000 como disponibilidad para carga de combustible, mensualmente.
Como los legisladores son 125 en total, esto implicaría una erogación de G. 9.150 millones de forma anual, y al actual cambio del dólar, que equivale a G. 8.000, representaría USD 1.143.000.
La semana pasada se hablaba de montos superiores, y la propuesta era G. 13.500 millones para el Senado, y G. 26.000 millones para la Cámara de Diputados, pero no se dio ninguna aclaración sobre los destinos.
Lo que resulta justamente llamativo es que últimamente el estudio del presupuesto, por parte de la Bicameral, se viene haciendo de una manera totalmente hermética, y sin acceso a los documentos ni tampoco dan datos a la prensa.
Tal es así que las discusiones sobre este proyecto de ley, considerado como el más importante y clave, se realiza a puertas cerradas, lo que genera suspicacias sobre el manejo que se le estarían dando.
Algunos senadores que también integran la citada Comisión hacen la vista gorda y se desentienden de las consultas sobre las definiciones que se van dando.
Otros parlamentarios que van en calidad de oyentes para tratar de involucrarse en el debate tampoco tienen muy clara la idea, y además alegaron que no tienen acceso a las documentaciones.
En el caso de los G. 13.500 millones para el Senado, y G. 26.000 millones para Diputados, supuestamente, se había mencionado que se incluiría la cuestión de los retiros voluntarios de los funcionarios.
Además, varios comentaron que el tema que tiene que ver con las autoasignaciones tanto con el polémico seguro como el cuestionado cupo de combustible surgió hoy y solamente se habría comunicado de manera verbal.
Trascendió que la Bicameral, integrada por diputados y senadores, formó un grupo en el que se comparten todas las decisiones y documentaciones sobre el PGN, pero estas no se entregan a los que no son parte de él.
Tras el dictamen final, la propuesta debe pasar nuevamente por ambas Cámaras del Congreso.
Ya en la época del entonces titular del Congreso Blas Llano se habían implementado una serie de recortes, que incluyeron seguros vips, bocaditos y cupos de combustible. Hasta los funcionarios habían estado en pie de guerra porque también alcanzaba algunos de los beneficios que percibían. Posteriormente, con la pandemia también se había dejado sin efecto los montos que tenían que ver con la asignación de más privilegios. Al contrario de lo que era el Senado, en Diputados continuaban con los beneficios. Con esta decisión de colocar de vuelta en el PGN, y aprovechando la mayoría, los senadores estarían recuperando los beneficios perdidos.